El hombre se distingue de otros animales y criaturas por su capacidad para juzgar lo que es permanente y lo que es transitorio, y su capacidad de reconocer el pasado, el presente y el futuro. Solo el hombre tiene la capacidad de comprender esta triple naturaleza del tiempo. El hombre puede reflexionar sobre el pasado y especular sobre el futuro. Puede experimentar el presente. Sin embargo, el hombre no debe preocuparse acerca de lo que es pasado. El presente es el producto del pasado. Lo que ha sucedido ya no se puede recuperar. Es inútil preocuparse por el futuro, porque es incierto. Preocúpense solo por el presente. Quizás por «presente» pensemos solo en este momento. Pero este no es el presente tal como lo ve la Divinidad. Para la Divinidad, el «presente» es lo que es «omnipresente». Esto significa que tanto el pasado como el futuro están presentes en lo que es, porque es el resultado del pasado y la semilla del futuro. Dado que el hombre no tiene una fe firme en la omnipresencia de la Divinidad, se preocupa por el pasado, el presente y el futuro. Para la Divinidad, estas tres categorías del tiempo no existen. – Bhagavan Sri Sathya Sai Baba (Divino Discurso, 3 de septiembre de 1988