Cultiven un temperamento dulce y hablen dulcemente, que es su consecuencia natural. Hablen sin cólera ni rencor, sin ningún artificio ni formalidad, directamente desde el corazón. Entonces, esparcirán alegría y amor entre todos. Cuando sus padres aleguen que no tienen los medios para vestirlas como ustedes desean o para darles las galas que ustedes anhelan, no se enfurezcan ni discutan con ellos. Sean lo suficientemente valientes para resistir la tentación de ceder a la presión de la gente. Recuerden: fomentar las buenas cualidades (guna-poshana) es tan importante como nutrir el cuerpo (deha-poshana). Ustedes van por ahí con vestidos atractivos y cargando montones de libros, pero déjenme decirles, el mayor producto de belleza es la virtud. Denle importancia a la disciplina (nishta) y no a la variedad en el desayuno (nashta). Pueden perder el desayuno pero no la disciplina. Vivan una vida regulada y disciplinada de ahora en adelante; hagan de ello un hábito, una armadura que las protegerá del mal. – Sathya Sai. Discurso Sep 12, 1963