Ustedes permanecen distantes, y se quejan de que la Gracia no les ha llegado. No quitan, mediante el proceso del arrepentimiento, el lodo y el óxido que les impiden quedarse. Se acercan por un momento, pero luego ponen distancia. No me refiero a la distancia física. Pueden estar físicamente lejos, pero mentalmente a Mi lado. Yo no mido la distancia en millas ni en metros; Yo estoy con ustedes, en ustedes y a su lado, siempre. Solo deben ser conscientes de Mí y hacer uso de Mi presencia. Deben convertirse en Aarthas, desgarrados de sufrimiento por percibir al Señor, sufriendo el dolor de esa angustia. Deben darse cuenta de que el solo sufrir es infructuoso si no conocen el camino para alcanzar al Señor. Es decir que deben transformarse en jijnaasus, buscadores. Analicen los cuatro purushaarthas (los cuatro objetivos de la vida) y entiendan que la meta, la culminación, es Moksha (la liberación). Comiencen a anhelar eso, como Arthaarthis, los que aman la auténtica ganancia. Busquen aquello que, al ser encontrado, les asegura todo lo demás. Sathya Sai. (Discurso, 3 de marzo de 1965).
