Hagan todo lo que puedan, lo más rápido que puedan. Si no pueden hacer el bien, al menos desistan de hacer daño o de encontrar faltas en aquellos que los sirven. Entiendan que el seva es una forma de sadhana (esfuerzo espiritual) incluso mejor que el dhyana. ¿Cómo puede Dios valorar el dhyana (meditación) que practican, si a su lado tienen a alguien sufriendo, a quien no tratan amablemente ni procuran ayudar? Muévanse entre la gente buscando oportunidades de servir, pero con el nombre de Dios en la lengua y la forma de Dios ante el ojo de la mente. Este es el sadhana más elevado. Dil me Ram, Hath me Kam: «Rama en el corazón y las manos en el trabajo». Actúen con este espíritu. La gracia de Dios les será derramada plenamente. Sathya Sai . (Discurso del 01 de febrero de 1970).