La culminación de la vida consiste en tomar consciencia del Atma (Atma-satshatkara). Para alcanzarla, debemos estar completamente libres de impulsos (vasanas). La liberación (moksha) es, en el verdadero sentido del término, la liberación de la atadura de estos impulsos. Estas tendencias son de dos tipos: benéficas y dañinas. Las tendencias benéficas están saturadas de santidad. Las dañinas alimentan la mente y la vuelven cada vez más incontrolable e inestable, extendiendo y fortaleciendo el deseo de placeres objetivos. Si ustedes incentivan y cultivan los impulsos benéficos (subha vasanas), los otros no continuarán multiplicándose indefinidamente y atando la mente; serán como semillas fritas, que ya no brotan. Si ustedes se aferran a los impulsos benéficos pueden adquirir con facilidad el conocimiento de Brahman. Estos impulsos se caracterizan por actividades tales como relacionarse con almas grandes (mahatmas), reverenciar a las personas excelentes, conversar con ellas y seguir su consejo. También se caracterizan por la caridad, la fortaleza, el amor, la paciencia, la verdad, el coraje, la continencia, etc. Dichos impulsos son impulsos puros. Sathya Sai. (Dhyana Vahini. C11. Versión en inglés).
