“La mente es una maravilla, y sus travesuras son aún más sorprendentes. No tiene una forma ni figura definida; adopta la forma y figura de aquello en lo que está involucrada. Su naturaleza es vagar de deseo en deseo y revolotear de uno a otro. Por lo tanto, es la causa de la pérdida y de la aflicción, de la exaltación y de la depresión. Sus efectos son tanto positivos como negativos. Vale la pena que el hombre conozca las características de la mente y las formas de dominarla para su propio beneficio. La mente es propensa a acumular experiencias y almacenarlas en la memoria. No conoce el arte de renunciar; no desecha nada. Como consecuencia, la aflicción, la ansiedad y la miseria continúan fermentando en ella. Con solo enseñarle a la mente thyaga (sacrificio), la persona podría volverse un yogui (persona espiritualmente serena).” Sathya Sai (Discurso 8 de Enero de 1983)