Mediante el poder de Vak (el habla) podemos adquirir un reino o grandes riquezas. Mediante el habla se pueden adquirir amigos y relaciones. Mediante el habla resultamos atados y perdemos la libertad. Incluso la muerte puede ser provocada por el habla. El habla es la fuerza vital de los seres humanos. El habla es la columna vertebral de la vida. Es todopoderosa. El santo Jayadeva se dirigió así a su propia lengua: “Oh, lengua, tú lo sabes todo acerca de la dulzura del habla. Disfrutas de la verdad y la bondad. Por eso, canta los dulces y sagrados nombres del Señor: ¡Govinda! ¡Damodara! ¡Madhava! No te permitas denigrar a nadie. Habla dulce y suavemente”. Krishna dice, en el Gita: “Que tu habla sea veraz, agradable, buena y libre de todo resentimiento”. Lamentablemente, al haberse hecho escasa el habla sagrada y dulce, la sociedad está plagada de amargura y discordia. La permisividad de una civilización demencial ha destruido la disciplina y la moralidad, y ha convertido a la sociedad en un infierno. Sathya Sai (Discurso, 22 de julio de 1994)
