“La disciplina es esencial para el éxito en cualquier emprendimiento del hombre, independientemente de que el campo sea económico, social, educacional o meramente material y mundano. Es aún más esencial para el éxito en el esfuerzo espiritual. La disciplina de la concentración es indispensable incluso para acciones comunes como caminar, hablar, escribir o leer. El esfuerzo espiritual y la felicidad dependen del esfuerzo disciplinado, y suelen llegar por medio del trabajo duro y esforzado, no a través de vías placenteras y fáciles. La vida es digna de ser vivida solo cuando tenemos hábitos disciplinados, concentración de la mente, renuncia a los placeres sensuales y fe en el Uno Mismo (el Atma). La disciplina y la concentración son como represas que controlan y dirigen el caudal de un río hacia canales inofensivos y fructíferos. Ustedes están comprometidos en el sadhana y en la indagación sobre el Uno Mismo, y en esta gran tarea, la disciplina y la concentración son de gran ayuda”. Sathya Sai (Discurso del 20 de noviembre de 1970).