Los caminos de la Divinidad son misteriosos. Es difícil comprender cómo actúa la gracia Divina. Hay innumerables casos en los que Dios acude al rescate de Sus devotos en tiempos de necesidad. Kabir, el santo, era tejedor de profesión. Un día cayó gravemente enfermo por lo que no podía cumplir con sus obligaciones. El Señor todo misericordioso, en la forma de Kabir, tejió el hilo y así acudió a su rescate. Del mismo modo, cuando Gora Kumbhar estaba atravesando dificultades, Dios acudió a su rescate en la forma de un alfarero y lo ayudó haciendo ollas Él mismo. Sakkubai, una ardiente devota del Señor Panduranga, cantaba continuamente el nombre del Señor. Un día, no podía realizar sus quehaceres diarios porque tenía mucha fiebre. Incluso en estas circunstancias, su marido y su suegra no le permitían descansar. En ese momento, el Señor Panduranga asumió la forma de Sakkubai y realizó todas sus tareas. Es imposible comprender cómo, cuándo y dónde Dios acudirá al rescate de Sus devotos. La fe absoluta es esencial para que Dios se manifieste. -Sathya Sai. Discurso, 3 de septiembre de 1999.
