Todos los objetos en la naturaleza son transitorios. Atraen al hombre y lo engañan. Los objetos que son de naturaleza temporal solo darán felicidad momentánea. Los Vedas hablan acerca del principio de “ritam”. Simboliza la verdad que no cambia. Todos los objetos mundanos sufren cambios. Cuando desarrollen “ritam” serán capaces de comprender la inmutable y eterna Divinidad. Pueden preguntar:“¿Cómo puedo tener la visión de Dios?”. “¡Oh, hombre! No necesitas buscar a Dios. Dondequiera que mires, Él está allí. Él está imbuido en cada objeto. No puedes verlo porque estás engañado por las apariencias externas. De hecho, tú mismo eres Dios. Por ende, los Vedas exhortan al hombre a desarrollar Fe en que: “Yo soy Dios y Dios no es otro que yo mismo”. Los nombres y las formas son muchos, pero Dios es uno. “Sarvam khalvidam Brahma” (en verdad todo esto no es otra cosa que Brahman). Esa unidad en la Divinidad debe ser realizada. “Satsang” significa la experiencia de la unidad. (Discurso del 1 de marzo del 2003)