La inmortalidad es el auténtico nirvana (la liberación). Samyak Drishti (la visión sagrada) es el primer paso. Consideren todo lo que ven como divino. Que su visión esté impregnada de amor. Una visión llena de amor es el sello distintivo de un verdadero ser humano. Todos son uno; sean como todos. Ustedes pueden comprender la unidad en la diversidad solamente cuando desarrollan una visión sagrada. El samyak drishti hace que perciban la presencia de la Divinidad en todos. Los vedas declaran: ekam Sat, viprah bahuda vadanti (la Verdad es una, pero los eruditos hablan de ella de muchas maneras). Vean el mundo con la visión de la verdad. Todos son uno; todos son esencialmente divinos. Abandonen la multiplicidad para lograr la unidad. El Vedanta declara que el principio átmico es la unidad subyacente a la diversidad. Los focos son muchos, pero en todos ellos fluye la misma corriente. De la misma manera, el principio átmico existe en todos. La incapacidad del hombre para comprender este principio de la unidad es la causa de su ignorancia. La auténtica humanidad reside en comprender la unidad en la multiplicidad. Sathya Sai (Discurso, 7 de mayo de 2001)