Ustedes son, en verdad, encarnaciones de la verdad, la bondad y la belleza; pero han extraviado la llave que les puede ayudar a aprovechar esas fuentes. Esa llave está en el reino de su conciencia interior; pero, como la anciana que perdió una aguja en su choza oscura y la buscaba debajo del farol de la calle (porque, como decía ella, había luz debajo de él), el hombre la busca en la región de los objetos materiales en el mundo exterior. Es para persuadirlos de que se dediquen a Namasmarana que Yo estoy concluyendo Mis discursos cantando algunos Namavalis (serie de nombres divinos). Un maestro tiene que escribir en la pizarra “A, B, C “ y pronunciar esas letras a fin de enseñarle a sus niños el alfabeto. No infieren que él mismo está aprendiendo el alfabeto, ¿verdad? Yo solo estoy iniciándolos en este sadhana tan eficaz. Fortalézcanse, purifíquense y edúquense por medio de este Nama-sankirtan (canto del nombre divino). Háganlo en voz alta y en compañía. Dejen que los que se unan a ustedes escuchen y también embeban el néctar del Nombre. -Sathya Sai. Discurso del 29 de marzo de 1968.
