Este mundo es la residencia del Señor: Isavasyam idam jagat. En consecuencia, nadie debería tener un sentido de posesión personal o incluso una traza de egoísmo. Renuncien al sentimiento de apego y sientan la presencia del Señor en todas partes. Abandonen los sentimientos «Yo» y «Tú»; solo entonces comprenderán la gloria de aquel que no es ni «Yo» ni «mío». Esto no implica que renuncien a todo. La prueba de fuego para decidir sin una actividad es impía o pecaminosa es examinar si proviene o promueve la avaricia. La verdadera enseñanza (atma-vidya) dice que el mundo debe ser tratado de acuerdo a como la tarea lo demanda, pero con un espíritu de desapego y evitando enredarse. Acepten la bienaventuranza espiritual que el Señor, la encarnación de la bienaventuranza espiritual, les confiere y experiméntenla con agradecimiento sin estar atados por el deseo. Vidya Vahini, C 1. Versión en inglés.