Discursos dados por Sai Baba
{SB 10} (19 de 39 discursos 1970)
Habla Sathya Sai
¿HABLA SATHYA SAI? Sathya Sai Habla: ¿Habla Sai estas palabras para oídos ávidos y áridos corazones? ¡No!… Es nuestra Madre quien nos habla, acariciando, persuadiendo; susurrando canciones de cuna para aliviar el dolor, bendiciendo con bienaventuranza. «No lloren», nos dice arrullándonos. Nos conduce suavemente por el camino, entre piedras y espinas. Cuando el camino es amargo, empinado, difícil, nos canta: Yogaksheman vahamyaham «Yo me hago cargo del bienestar de tos que se entregan a mí». Así habla nuestra Madre. Sathya Sai Habla: ¿Habla Sai estas palabras en oídos que zumban y en palpitantes corazones? ¡No!… Es nuestro Padre quien nos habla, perfeccionándonos, revelándonos y recordándonos nuestro nombre, ¡años ha olvidado, años ha engendrado! «No teman», nos fortalece. Hacia arriba, adelante; hacia el bien, hacia Dios, nos guía, nos cuida. Cuando el camino es tortuoso y dificil, nos ayuda a salir adelante. Na Sukhal Labhyathe sukham «La felicidad real y duradera no se obtiene por medio de la satisfacción material» nos dice nuestro Padre. Sathya Sai Habla: ¿Habla Sai estas palabras en oídos laberínticos y alocados corazones? ¡No!… Es nuestro Maestro que habla, aconsejando, aleccionando, calentándonos en el crisol, tratándonos severamente y conduciéndonos al Dios interno. «¡Ishavasyam idam sarvam!» No hay ningún otro; Él abre 1a tapa del Cofre Divino con un tesoro encerrado en las cinco envolturas, y dice: «El eterno Brahman es Verdad y Conocímiento»… así habla el Maestro. Sathya Sai Habla: ¿Habla Sai estas palabras en nuestros anhelantes oídos y ansiosos corazones? ¡No! Es Dios quien habla, calmando la inquietud de la mente. «El que conoce a Brahman se vuelve Brahman». «Devengan y sean», nos despierta. «¡Amada ola, emergiendo, fúndete! Amado rayo, corre de vuelta», llama Él. Amada chispa, vuelve a entrar al fuego; tú eres yo, yo soy tú. Soham pierde so y ham, y queda sólo el Om que es Él y nosotros, Brahman… Ser… Om. Así nos habla Sai. N. Kasturi |