Discursos dados por Sai Baba
{SB 15} (42 de 59 discursos 1981 a 82)
41. 26/01/82 El canto del Nombre
( Impreso en castellano en Mensajes de Sathya Sai, Tomo 11 cap. 43 )
El canto del Nombre
26 de Enero de 1982
LA PRESENTE ERA, llamada Kali yuga, es, de hecho, la era en la que pueden obtener liberación más fácilmente. Esto lo revelan las Escrituras. La razón, de acuerdo con ellas, es que pueden liberarse mediante el sadhana del nama sankirtan, cantar la gloria del Señor y escuchar su nombre cuando se cante. Entre los nueve pasos de la devoción, escuchar el nombre cuando se canta (sravana) y cantar el nombre (kirtan), se mencionan como los más efectivos. Kirtan consiste en cantar los nombres que describen la gloria del Señor y sankirtan significa «cantar los nombres continuamente, en voz alta, sin interrupción y sin vacilación». Mientras que kirtan lo puede hacer un individuo para fomentar su progreso espiritual, sankirtan es para un grupo de personas. Puede ayudar al proceso de liberación, no sólo de los miembros del grupo, sino también beneficiará a aquéllos que escuchen y aun a los que estén más allá del círculo de oyentes; el mundo entero puede beneficiarse con las vibraciones.
Sankirtan posee cuatro formas de devoción, con distintas características. Ellas son: 1) guna sankirtan, 2) lila sankirtan, 3) bhava sankirtan y 4) nama sankirtan. Examinemos estas cuatro formas brevemente.
Guna sankirtan consiste en describir y adorar los gunas, atributos o cualidades de Dios, para exaltarlo y ganar su gracia. Pero Dios es gunathitam, más allá de satva, rajas y tamas (las cualidades de la materia); Él realmente carece de atributos. Atribuirle cualidades es disminuir su gloria; ellas existen en la imaginación de los devotos y alabar a Dios como poseedor de esos atributos puede otorgar al devoto sólo satisfacción efímera.
Lila sankirtan es la segunda forma. La creación entera representa el lila de Dios. No sólo eso, su preservación y disolución son también lilas (juegos) de Dios. ¿Cómo puede describir alguien el plan maestro de los lilas de Dios? Ellos adoptan diversas formas. Como lila, podrían imaginar que el Universo entero desapareciera. Su sankaÍpa (voluntad) es todopoderosa, cualquier cosa que acontezca, buena o mala, es el lila de Dios. Si no adoptan una actitud de ecuanimidad hacia lo bueno y lo malo, no podrán afirmar que han entendido a Dios. Los aspirantes espirituales de hoy están felices cuando pasa algo bueno; cuando algo malo hace su aparición, sucede todo lo contrario. Cuando la creación entera es un lila cósmico de Dios, escoger unos pocos y contarlos es un síntoma de debilidad y visión estrecha.
La tercera forma es bhava sankirtan. Los devotos fieles a este sendero de adoración adoptan una u otra de las seis aproximaciones, actitudes o relaciones especiales con Dios e intentan consumarla. Debo aclarar que las seis son deficientes y están basadas en limitadas concepciones de la Divinidad: 1) Santha bhava. En ella se insiste en que el devoto soporte alegremente todo lo que le pase, pues proviene de la gracia. En el Mahabharata se describe a Bhishma como el supremo modelo de esta forma. Pero él, por su propia voluntad, ¡pospuso el momento de su muerte para tener el mérito de deshacerse del cuerpo en un día auspicioso! Él creía que morir durante la primera mitad del año era más santo que morir antes de que el Sol cruzara el Trópico de Capricornio, pues esto provocaría un mal futuro. Cuando Dios es ambos, el tiempo y más allá del tiempo, ¿quién es el hombre para dividir el tiempo en bueno y malo? La felicidad o miseria que le espera no depende del momento en que muere. Creer esto es síntoma de debilidad en los devotos de Dios.
2) Sakhya bhakfi es la devoción a Dios como a un amigo cercano. A Arjuna se le cita como el que fue liberado mediante este tipo de relación; sin embargo, éste se encontraba perdido en los aspectos humanos de la amistad y del parentesco, y a menudo se desviaba de la devoción a la Divinidad; logró la cercanía con el Señor muy fácilmente, de manera que no era capaz de reconocer la importancia de la proximidad que le fue otorgada. Eran tan amigos que Arjuna se dirigía a Krishna familiarmente empleando la palabra «cuñado». Esto indicaba sólo un parentesco humano; así, Krishna confirmó tal relación y justificó esa expresión de familiaridad cuando llevó a cabo el matrimonio de su hermana Subhadra con Arjuna. Por lo tanto, ni la actitud sakhya puede ser , completamente benéfica.
3) Dasya bhakfi es la siguiente forma de acercamiento a Dios. Enaltece la actitud del sirviente hacia su amo; Hanumán es el ejemplo clásico del devoto que encarna este tipo de devoción. Él estaba al servicio de Rama en todo momento; aunque tenía la forma de un mono, había dominado ya las sesenta y cuatro ramas del conocimiento y el significado de los cuatro Vedas; podía recitar los seis Shastras (Escrituras). Él era física, mental y espiritualmente un formidable héroe; sin embargo, servía a Rama sin ninguna traza de ego en pensamiento, palabra y obra; había adquirido pureza en estas tres.
Pero el dasya bhakfi de Hanumán no estaba libre de defectos, su servicio era firme y total hacia Dios como Rama; no estaba apegado a Dios como Krishna o con cualquier otro nombre. Los Vedas declaran que Dios tiene mil nombres y que puede asumir mil formas. La lealtad de Hanumán estaba limitada a un nombre y a una forma. Dasya bhakti, por ende, confiere una visión parcial del Absoluto Universal.
4) Vatsalya bhakti aconseja al aspirante adoptar la relación de una madre con su hijo. El ejemplo para el aspirante es el de Yasoda y su adoración por el niño Krishna. Ella sólo reconocía esta relación, aunque otros alababan a Krishna como «el que vive en la ciudad de Matura» y lo adoraban como «el que está instalado en el corazón de las gopis, pastoras». Cuando Udhava llegó de Matura, Yasoda le preguntó acerca de su Gopala. «Yo no conozco al Krishna que vive en Matura o en el corazón de las gopis. Te pregunto acerca de mi niño Gopala». Ella insistía. Así, el vatsaiya bhakfi también conduce a una cierta exclusividad.
5) El siguiente tipo de devoción se llama anuraga bhakti. Las gopis de Brindavan son el mejor ejemplo de la consagración a este sendero. Mucha gente aviesa y con prejuicios no reconoce la pureza y el valor de este sendero. Muchos lo interpretan mal y lo toman como un sendero erróneo. Las mentes e ideas estrechas pueden arruinar nuestra vida y la vida de otros, como la plaga destruye las cosechas. Las gopis tenían el sentimiento dual de amado y amante. La dualidad la origina la ignorancia; la mente propicia la dualidad de gustos y aversiones; el nacimiento produce karma; karma causa aflicción y gozo, la reacción dual.
6) Ma~a bhakti es el último sendero, y Radha es el ejemplo único de éste. En el momento en que el nombre de Krishna era pronunciado, ella se perdía en indescriptible paz y bienaventuranza. No obstante, madhura bhakti supone dualidad; por eso, bhava sankirtan, en sus diversas formas, no confiere la total conciencia de Dios.
Consideremos la cuarta forma: nama sankirtan. Ella puede garantizar completa felicidad a toda persona, en todo lugar y en todo tiempo; no puede existir nada más grande o más gratificante; los nombres Rama, Hari, Hara, Sai, Baba, Krishna, compuestos de dos sílabas, derivan de la palabra prema, que es la esencia y el corazón del Alma. El prema o amor tiene que inspirar nuestros pensamientos, impregnar nuestras palabras e impulsar nuestras acciones. La palabra narra tiene un gran significado numerológico. Na es igual a cero, a es iguala dos y ma iguala cinco, sumando en total siete, lo que indica que el namasankirtan nece sita, para tener éxito, siete elementos: sruti, laya, raga, tala, bhava, prema, samhita. Siete connota los siete swaras (notas musicales), los siete rishis, los siete días de la semana conocidos como sagrados (sapthaha). Sankirtan debe entonarse con énfasis en la melodía, en el ritmo, en la actitud y la devoción y en el logro del más alto bien. No es
cantar por cantar; la melodía debe surgir del corazón, del amor genuino, que es tan ardiente que por sí mismo es tapas. El sankirtan que proviene de tales aspirantes liberará al individuo y transformará la comunidad y el mundo.
¡Encarnaciones del Amor!: Aun si ustedes son incapaces de hacer meditación o repetición del Nombre, dedíquense a cantar el Nombre de Dios, sin temor y con fe.
«Dharmakshetra», Bombay
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