Discursos dados por Sai Baba
{SB 23} (36 discursos 1990)
23. 02/06/90 La moral forma al hombre y a la nación
( Impreso en castellano en Mensajes de Sathya Sai, Tomo 23 cap. 23 )
La moral forma al hombre y a la nación
2 de Junio de 1990
Lo Divino está presente en las montañas, en todos los lugares elevados y en los pensamientos nobles que inspiran a los seres humanos. Lo Divino está presente en las selvas, en la paz que prevalece en las calles tranquilas, en la fresca brisa que sopla y en el aire puro que respiran. En cada aldea donde existe una atmósfera sagrada y la armonía predomina entre las personas, lo Divino está presente. En las ciudades, Dios está presente en los edificios hermosos, en los atractivos que disfrutan los ciudadanos y en las vidas iluminadas de las personas. Mallamma, de Karnataka, proclamó la omnipresencia de lo Divino en versos inspiradores. Ella declaró en una canción: “El loto proporciona belleza al estanque. Las casas proporcionan encanto a las aldeas. Las olas confieren belleza al océano. La Luna embellece el cielo”. Lo Divino está presente dondequiera que hay belleza. Por eso los Upanishads describieron a lo Divino como “Sathyam (Verdad), Sivam (Bondad) y Sundaram (Belleza)”.
La cualidad humana es lo que confiere belleza a los seres humanos.
El requisito más esencial en cualquier sociedad es Manavatvam (la cualidad de humano); cualquiera que sea la erudición, el conocimiento científico o la posición que alguien posea, él tiene que desarrollar cualidades humanas. La sociedad, el estado y la nación progresarán en la medida en que estas cualidades sean desarrolladas. Donde las cualidades humanas están ausentes, la sociedad deja de ser civilizada y la nación misma pierde su lugar de honor.
La moralidad y la integridad son dos moradas de lo Divino Solo la moralidad y la integridad dan derecho al hombre a ser respetado. Los estudiantes deben alimentar las cualidades humanas. Sólo adhiriendo a la senda espiritual, las cualidades humanas pueden ser promovidas. Ellas no florecerán en otras condiciones. Una semilla germinará y se convertirá en una planta únicamente si se la siembra en terreno adecuado y se la riega.
No crecerá en una lata; allí se pudrirá.
La moralidad y la integridad sólo pueden crecer en la mente humana. La moralidad es el soporte de todas las cualidades humanas.
La buena conducta se funda en la moral. La moralidad eleva al hombre a la etapa más alta. Bharat ha enseñado a todas las naciones a sostener la grandeza de la moralidad basada en la espiritualidad. La moralidad y la integridad son las moradas reales y eternas de lo Divino. Lo que la nación necesita hoy es moralidad. La moralidad debe ser considerada como un requisito primordial en todos los lugares y en todos los tiempos.
Un gran general dijo que uno no debía abandonar los principios morales, ya fuera en la guerra o en cualquier situación difícil.
Gladstone, que fue primer ministro durante el reinado de la reina Victoria, siempre se adhirió a la moralidad en toda situación.
La gente lo respetaba a él incluso más que a la reina.
La moralidad puede sostenerse sólo mediante el control de los sentidos. Únicamente la persona que posee autocontrol está calificada para ejercer autoridad sobre otros. ¿Cómo puede alguien demasiado débil para controlarse a sí mismo ser capaz de controlar a otros? Debe haber unidad de palabra y acción.
Sólo entonces se podrán lograr grandes cosas.
El mundo necesita hombres que posean autocontrol Hoy existe muy poca coherencia entre palabras y acciones. La verdad prevalece cuando las palabras corresponden a las acciones. La mente está en armonía cuando las palabras y las acciones concuerdan. Los estudiantes deberían tener presente el honor, el bienestar y el progreso de la nación y llevar vidas ejemplares.
Hoy, los estudiantes no comprenden lo que es el autocontrol.
En términos Vedánticos, el control de los sentidos se denomina Samyama. Samyama es una cualidad única del hombre. Al dar rienda suelta a los sentidos y llevar vidas libertinas, el hombre está perdiendo su divinidad. El término sánscrito para el control de los sentidos es Dama. Aquien ha cultivado Dama se lo llama Danta.
Ahora, el mundo necesita hombres que posean control de sus sentidos y no hombres que prediquen metafísica. En la actualidad, todo el Vedanta ha quedado confinado a las palabras. La habilidad en el habla y la ostentación en el comportamiento se acrecentaron, mientras que la buena conducta ha declinado, dando como resultado que el hombre ha perdido la dicha de vivir.
Cada estudiante debe volverse un Danta (alguien que posee control de sus sentidos). Los estudiantes desarrollan hábitos ostentosos, incluso antes de haber comenzado sus estudios.
No saben lo que es la humildad. No tienen conciencia de cómo comportarse frente a los mayores. No se los debe culpar por esto.
Sus padres y maestros no han inculcado y alentado en ellos estas cualidades.
En la actualidad, los estudiantes están interesados en la charla banal y el chisme trivial. Tratan con ligereza a la espiritualidad.
Como estas tendencias están creciendo continuamente, ellos no tienen idea de lo que es la educación correcta. No deberían considerar a la educación únicamente como un medio para ganarse la vida. Deberían verla como la base de una vida buena.
La educación no es para adquirir riquezas Sin duda, es necesario buscar un empleo para ganarse la vida.
Sin embargo, no tendrían que apreciar empleos y dinero como la meta última de la vida. Incluso en un empleo, uno debería tratar de sostener la moralidad y la integridad y establecer un ejemplo para otros. Observando el mundo actual, parecería que la educación sirve para practicar el fraude, para hacer dinero mediante sobornos y otros métodos inmorales e incorrectos, sin consideración por la verdad. Ciertamente, ése no es el propósito de la educación. Su objetivo es la adquisición de conocimiento.
Los verdaderos valores educativos se han perdido a causa del interés excesivo por hacer dinero. No hay nada malo en el dinero o la educación. Todo depende de cómo se los adquiera y se los utilice.
¡Estudiantes! Ustedes tienen que exhalar en la misma medida en que inhalan. Esto es inevitable. Si no exhalan, los pulmones estallarán. Del mismo modo, aunque tienen que adquirir educación y ganar dinero, deben utilizar ambos de un modo correcto.
La educación recibida tiene que ser devuelta a la sociedad para promover el bienestar público. Igualmente, lo que es ganado debería ser devuelto a la sociedad. Amenos que hagan esto, su educación y riquezas no tendrán ningún valor. Lo que se ha obtenido de la comunidad ha de ser devuelto a la comunidad.
Eso es verdadero seva (servicio). Es raro hallar este espíritu de sacrificio entre los estudiantes; están interesados en adquirir más y más. La vida ha quedado reducida a un tráfico en un solo sentido. Esto no es correcto. Lo que se gana debería ser correctamente utilizado y compartido con otros. Éste es el modo de ennoblecer la vida.
Cuando nadan, tienen que empujar el agua hacia atrás para poder avanzar. Del mismo modo, renunciar a las cosas materiales es el modo de progresar espiritualmente. Sin embargo, a lo que tienen que renunciar no es a la riqueza únicamente. Tienen que librarse de todas sus malas cualidades. Sólo eso es verdadero sacrificio. Renunciar a la familia y al hogar no es un gran sacrificio. El verdadero renunciamiento consiste en abandonar todos los vicios. Sólo eso puede resultar en el florecimiento de la personalidad humana.
La educación es el cimiento de la vida ¡Estudiantes! El hecho de que el hombre se comporte como un ser humano es, en sí mismo, una gran tarea. Nada es más degradante que comportarse como un animal. Hoy, el hombre es golpeado por seis notorios enemigos: la lujuria, la ira, el engaño, la codicia, el orgullo y la envidia. Cuando dediquen todas sus acciones a Dios, Él los protegerá siempre.
Con este espíritu de completa dedicación, el poeta Potana comenzó a escribir su Bhagavatam (en telugu). El Bhagavatam trata acerca de la unión del Paramatma (El Espíritu Supremo) y el Jivatma (el espíritu individual). Comenzando con Bhakti (la devoción a Dios), uno gradualmente adquiere Jñana (la Sabiduría Suprema) y alcanza el estado de Vairagya (el desapego completo). La Verdad es descubierta sólo a través del desapego.
Y la Verdad conduce a Mukti (la liberación).
El proceso educacional es el cimiento de la vida. Los estudiantes son descritos como Brahmacharis. Sobre el cimiento de la vida de un Brahmachari se levantan las paredes de Grihasta (la vida familiar). Sobre estas paredes se encuentra el techo de Vanaprasta (la vida de un renunciante). A menos que se establezcan cimientos firmes, todo el edificio colapsará. Por lo tanto, los estudiantes (que se hallan en la etapa del Brahmachari) deben cultivar buenas cualidades, que les servirán como escudos protectores en la vida. Sin tales cualidades, no habrá paz en la vida.
Pongan al ego en último lugar Las personas deberían comprender que nacen en la sociedad, crecen en la sociedad y viven en la sociedad. Hoy la mayoría de ellas se contentan con pensar sólo en sí mismas y en sus familias y son indiferentes a sus obligaciones para con la sociedad. Como resultado, pierden la paz y la felicidad. Incluso los devotos están más preocupados por sus intereses personales y ponen a Dios en segundo lugar. En consecuencia, son incapaces de experimentar la verdadera bienaventuranza. Ellos llevan vidas sin propósito ni sentido.
Los Kauravas son ejemplo de personas que buscaron ganancias materiales y poder, olvidando a Dios. Aunque poseían riquezas inmensas, ¿qué les ocurrió, finalmente? Tenían a muchos valerosos héroes y preceptores luchando de su lado, pero todos sus recursos materiales, sus habilidades intelectuales y su poderío en armamentos no les sirvieron de nada.
Los Pandavas confiaron en la fuerza de lo Divino y en el poder de la rectitud. El Bhagavad Gita ha explicado claramente que la Divinidad ayuda a aquellos que se adhieren al Dharma.
Los Pandavas dependían de Dios para todo. Por eso fueron coronados con el éxito. No cabe duda de que los Pandavas tuvieron que enfrentar muchas dificultades, pero éstas no los abrumaron.
Ellos ponían a Dios primero, al mundo después y al “yo” en último lugar. Por eso tuvieron éxito. Los Kauravas colocaban al “yo” (al ego) primero, al mundo después y a Dios en último lugar.
¡Por eso lo perdieron todo! ¡Estudiantes! Pongan al ego en último lugar. Nuestra historia está llena de ejemplos de personas que establecieron un ideal sacrificando su ego.
La humildad es la insignia de verdadera educación Puede ser natural que la juventud apasionada esté llena de orgullo egoísta. ¡Estudiantes! Consideren a la humildad y la disciplina como las insignias de la verdadera educación. Hay un conocido dicho telugu que declara: “La educación confiere humildad.
Mediante la humildad uno adquiere competencia. La competencia da la capacidad de obtener riqueza. Mediante la riqueza Dios será realizado”. Pueden ver cómo la humildad los conduce a Dios. Si a causa del orgullo egoísta son indiferentes a lo Divino y al Dharma, no tendrán estos pensamientos sagrados.
Hagan el mejor uso del cuerpo, del tiempo y de las oportunidades que les han sido otorgados. Estudien bien y usen su conocimiento para el beneficio de la sociedad. La mera adquisición de grados académicos no tiene ningún valor. Sólo la arrogancia crece con el aumento del conocimiento académico. Hay entonces una disminución correspondiente del potencial espiritual.
Si la espiritualidad crece, el egoísmo disminuirá. Debido a que los hombres han olvidado su herencia divina, se comportan peor que las bestias salvajes.
La riqueza material no es lo más importante en la vida. El poder, el dinero y la posición no son permanentes. El egoísmo es el peor enemigo del hombre. No tiene una base real. Debido a este tonto orgullo, el hombre no está tomando conciencia de su verdadera identidad.
Debería haber un cambio interior A pesar de todas las prácticas religiosas que muchos suelen adoptar, hay poco cambio en sus actitudes mentales. Los cambios en la conducta externa tienen poco significado. La mente es lo que debe modificarse. Cambiar el traje no significa nada.
Sus gunas (cualidades) deben cambiar. Los estudiantes serán los líderes de mañana. Si se reforman a sí mismos, la nación cambiará. El futuro del país depende de ustedes. Si se adhieren a la moralidad y la integridad, el país se volverá un ideal para el mundo.
Bharat ha sido conocida desde los tiempos más remotos por su gloriosa cultura. Todos ustedes deben esforzarse por restablecer la grandeza de Bharat como líder cultural y espiritual de la humanidad. Bharat dio al mundo el supremo mensaje de sus Upanishads y epopeyas mediante su propio ejemplo de vida armoniosa y virtuosa. Debido a que hoy este sagrado modo de vida ha sido abandonado, nadie es capaz de reconocer la grandeza de la cultura india.
¡Estudiantes! Tengan presentes tres cosas: Los Bharatiyas siempre han sido partidarios fervientes de la verdad y la rectitud.
La justicia ha sido su consigna. Los estudiantes deben esforzarse incesantemente por adherirse a la Verdad, la Rectitud, la Moralidad y la Integridad. Vivan de acuerdo con el mandato Védico: “Digan la Verdad. Sigan el Dharma”.
Traten de poner en práctica las enseñanzas que han recibido durante estos quince días y hagan que así sus vidas tengan sentido. Siempre deben amar a su Madre Patria. No tiene nada de malo que alguien ame a su país, pero no debería sentirse antipatía por ningún otro país. “En la sagrada tierra de Bharat, la tolerancia ha sido el tesoro más precioso. De todas las formas de disciplina espiritual, la penitencia más difícil es la adhesión a la Verdad y la Rectitud”. Éste ha sido el credo básico de la sagrada tierra de Bharat. Olvidando esta herencia bendita, los Bharatiyas están yendo tras prácticas y modos de vida exóticos.
¡Estudiantes! Tienen el deber supremo de proteger y nutrir la cultura de Bharat. Oren por el bienestar de todas las naciones y los pueblos. Tengan una visión amplia. Abandonen las ideas estrechas.
Por sobre todo, sea lo que fuere lo que diga cualquier persona, ustedes no deben descuidar su devoción a Dios. Sin el amor de Dios, este cosmos es un vacío. El Amor es Dios: Dios es Amor. Desarrollen este Amor Divino. Aliméntenlo en sus corazones en todo momento y situación. No renuncien a él, cualesquiera que sean los problemas o dificultades que tengan que enfrentar. Ese Amor estará con ustedes, dentro de ustedes y junto a ustedes y los protegerá.
No culpen a Dios si tienen que enfrentar dificultades. Considérenlas incluso como regalos de Dios para su propio bien. La vida es una sucesión de lo bueno y lo malo. Si vencen estos altibajos de la vida, con fe firme en Dios, Él los cuidará. Siempre recuerden el Nombre del Señor.
Discurso durante el Curso de Verano en Brindavan, el 2 de junio de 1990.