Discursos dados por Sai Baba
{SB 28} (38 discursos 1995)
19. 11/07/95 Obtengan la amistad de Dios
11 de Julio de 1995 Sai Kulwant Bhavan, Prashanti Nilayam Destruyendo el orgullo el hombre se vuelve entrañable; destruyendo la ira el hombre se libra del pesar; destruyendo el deseo el hombre obtiene paz; destruyendo la codicia el hombre alcanza la felicidad. ¡Encarnaciones del Amor! Mientras un hombre esté lleno de arrogancia, no podrá ganarse ningún tipo de respeto de otros. El egoísmo causa la ruina de un hombre. Sólo cuando un hombre se libra del orgullo la gente lo respeta y lo ama. El primer requisito para obtener la estima y el amor de la gente es erradicar el Ahamkara (engreimiento). El segundo es Krodham (la ira). Un hombre consumido por la ira jamás puede estar libre del sufrimiento. La ira lleva consigo un fuego abrasador. También es descrita como Krodhagni (el fuego de la ira). Mientras uno esté consumido por este fuego, no podrá tener felicidad. Para librarse del sufrimiento, el hombre tiene que librarse de la ira. La ira también es la causa de la depravación en el hombre. Lo arruina de diversas formas. Lo aliena de sus parientes y amigos. Hoy el orgullo y la ira son la causa principal de la declinación de las cualidades humanas. El tercer enemigo del hombre impregna todo su ser. Es el deseo insaciable. La vida entera del hombre está llena de un sinfín de deseos que aumentan permanentemente. El hombre puede obtener paz mental sólo a través de la conquista de Kama (el deseo). El cuarto enemigo es la codicia o la avaricia. Cuando el hombre supere la codicia, podrá alcanzar la felicidad. Un hombre codicioso no puede disfrutar de felicidad corporal, mental o espiritual. El avaro es como el perro del hortelano. Ni disfruta de su riqueza, ni les permite a otros disfrutarla. El mundo desprecia a un avaro. Sólo cuando el hombre se libre de estas cuatro cualidades indeseables podrá experimentar paz y felicidad. Estos cuatro vicios no tienen lugar en un verdadero ser humano. El corazón humano debería estar lleno de compasión El hombre es la encarnación misma de lo Divino. Esta Voluntad Divina recibe el nombre de Prakriti (el cosmos). La Voluntad Divina está presente en cada ser humano. El hombre ha nacido para dar expresión a la Voluntad de Dios. El corazón humano debería ser un océano de leche lleno de compasión. El corazón, dentro del cual debería hallarse esta leche de la compasión, hoy se ha llenado de estas cuatro malas cualidades. Los antiguos sabios tuvieron una visión del Supremo Señor Vishnu reclinado en el Kshirasagara (Océano de Leche) y lo adoraron en esa forma. Así fue como el santo Tyagaraja describió al Señor en su famosa canción que comienza con las palabras Kshira-sagara sayana (Oh, Señor, reclinado en el Océano de Leche). (Swami cantó algunas líneas de la canción.) ¿Qué es este Océano de Leche? ¿Se encuentra en algún lugar de la tierra? En este mundo terrenal con sus intereses materiales, no puede percibirse este Océano de Leche. Sin embargo, existe. ¿Dónde? En cada corazón humano. En este corazón descansa el Señor Sriman Narayana. Ésta es la razón por la que el Señor es descrito como Hridayavasi (el Morador del corazón). Cada corazón humano es un templo de Dios. En el Océano de Leche de semejante corazón, no debe haber lugar para que habiten cocodrilos y ballenas en la forma de malas cualidades. Desafortunadamente, debido a la influencia de la Era de Kali, el Océano de Leche en el corazón humano se ha convertido en un Ksharasagaram (Océano de sal) en el cual el apego y el odio habitan en la forma de cocodrilos y ballenas. La sal de este Océano es obra del hombre. Hoy ciudades como Madrás y Bombay están cerca del mar. ¿Pero pueden utilizar su agua? No, porque es salina. Las deidades y los demonios en la vida diaria Los antiguos sabios solían orar así: “Oh, dioses, les damos la bienvenida. Oh, Rakshasas (demonios), apártense de nosotros”. ¿Quiénes son estos dioses? Estas deidades son: los buenos pensamientos, los buenos sentimientos, la buena conducta. Los sabios oraban para que tales seres celestiales entraran en sus mentes. Los demonios de los que ellos querían librarse son los malos pensamientos, los malos sentimientos y las malas acciones. Éste es un ejemplo que todos deben seguir en la vida cotidiana. En la vida diaria, uno consume las cosas buenas y evita las malas. Consume alimentos buenos y defeca lo que no es saludable. Éste es un principio básico. Deben renunciar a lo malo para dar lugar al ingreso de lo que es bueno. Ésta es la lección de la experiencia diaria de cada uno. Desafortunadamente, hoy los hombres renuncian a lo que es saludable e ingieren lo que es perjudicial. Es decir que están dejando entrar lo malo y renunciando a lo bueno. Por esta razón predominan el desorden y el sufrimiento en el mundo de hoy. Por ende, la primera necesidad es cultivar buenas cualidades. Los malos pensamientos y los malos hábitos tienen que ser desechados. No reconociendo esta verdad, el hombre se vuelve víctima del sufrimiento y el descontento. ¿Pueden decir que este sufrimiento y esta preocupación fueron causados por la Providencia? En absoluto. Sus propios malos pensamientos y actos son la causa de su sufrimiento. Cosecharán lo que siembren. La semilla determina el fruto. Cuando el hombre abriga malos pensamientos, los malos resultados lo persiguen. Cuando él tiene buenos pensamientos, los resultados también son buenos. No culpen a Dios por su pesar Quienes no reconocen este hecho, culpan a Dios. Ellos se lamentan diciendo: “¡Oh, Dios! ¿Por qué me estás causando este sufrimiento? ¿Por qué me estás negando la paz mental?”. Dios es el Eterno Testigo. Él es el dispensador de los frutos de las acciones. Él les da según sus merecimientos. No es de ningún modo responsable del pesar o la felicidad de ustedes. (Swami cantó una canción que señalaba que el hombre siembra semillas venenosas, deseando obtener frutos dulces. Incapaz de comer los frutos venenosos, él culpa a Dios.) Esto es producto de la ignorancia. Se opone al carácter sagrado de la vida humana. El primer deber del hombre es practicar la buena conducta. Tal buena conducta puede derivar sólo de la contemplación de Dios. Las personas deben cultivar pensamientos sagrados acerca de Dios en sus corazones. Esto no es algo que pueda obtenerse de alguien o de algún lugar fuera de ustedes. Está dentro de ustedes. Lo Divino está presente dentro de ustedes. Quienes perciben esta Presencia en su interior pueden experimentar una dicha indescriptible, dondequiera que se encuentren. No basta con que estén aquí. Deben tomar conciencia de la dulzura que les produce su presencia aquí. Un sapo que está cerca de un loto no es consciente en absoluto de su miel nectarina. Sin embargo, una abeja viene desde lejos y liba la miel. Las personas deben tomar conciencia de que el tiempo es efímero y la vida de uno se derrite a cada momento como un bloque de hielo. El hombre se aproxima a su fin incluso antes de tomar conciencia de su deber primordial. ¿Cuál es ese deber? Es descubrir el propósito de la vida. El hombre busca riquezas, comodidades, posición y felicidad. ¿Cómo se han de obtener? Alejándose de la gracia de Dios, el hombre busca todos estos tipos de felicidad mundana. ¿De qué sirven estos placeres físicos transitorios? Tyagaraja trató de descubrir dónde residía la felicidad real. ¿Es en la riqueza o es en el servicio al Señor Rama? Si uno es bendecido con la gracia de Dios, ¿qué más necesita? Pongan en práctica los impulsos sagrados para experimentar la bienaventuranza interna Por ende, busquen la gracia de Dios desde el comienzo. ¿Acaso la verdadera felicidad reside en el disfrute de las comodidades materiales? No. La verdadera felicidad consiste en manifestar todas las potenc ¡Encarnaciones del Amor! Lo más importante que tienen que reconocer es que su corazón es un Kshirasagaram (Océano de Leche). Sin embargo, debido a la invasión de malos pensamientos y sentimientos, su condición humana se ve viciada. La condición humana implica armonía de pensamiento, palabra y acción. La libertad de ustedes está sujeta a las normas de la sociedad Hoy han venido aquí devotos provenientes de todas partes del mundo. Sea cuales sean sus vestimentas, su educación, sus hábitos, cada uno de ustedes tiene que tomar conciencia de un hecho supremo. Ustedes son miembros de la sociedad y, como tales, tienen que respetar las normas sociales. No pueden comportarse como les plazca. Todas sus acciones deben estar de acuerdo con las obligaciones hacia la sociedad. La libertad de ustedes está sujeta a las normas de la sociedad. Sociedad no significa un grupo numeroso de personas. La relación con cualquier persona está gobernada por obligaciones sociales que limitan la libertad de uno. El derecho de ustedes a esgrimir un palo en la mano en un lugar público está limitado por el derecho de otros a utilizar los espacios públicos. La libertad de ustedes está sujeta a su deber hacia sus semejantes. Además, Svatantram (la libertad) tiene que ser construida del modo correcto. Svatantram consiste de dos términos: Sva y tantram. Sva significa el Espíritu. Svatantram significa actuar según los dictados del Espíritu. El Espíritu jamás causará daño a otros. Es el Eterno Testigo presente en cada uno y desea el bienestar de todos. Por ende, Svatantram o la verdadera libertad está relacionada con la Voluntad Divina. El deber está relacionado con las obligaciones de uno para con la sociedad. La libertad está relacionada con la expresión de la Voluntad Divina. Prakriti (el mundo fenoménico) es una proyección de lo Divino. Por ende, debe considerárselo sagrado. El deber significa reconocer el carácter sagrado de las obligaciones de uno hacia Prakriti. Cada uno debe reconocer que él o ella es una imagen de Dios y comportarse sobre esa base. Sólo es un verdadero hombre aquel que vive su vida de este modo. Considerando que sólo el cuerpo físico es real, el hombre va tras los objetos mundanos y finalmente termina en la miseria. El hombre debe transitar el camino espiritual. Esto significa que uno debe reconocer al cosmos entero como una imagen de Dios. Cuando uno tiene esta convicción, el mal jamás puede acercársele. Experimenta la bienaventuranza en todo momento y lugar. Desea que todos sean felices. Desafortunadamente, hoy la mayoría de las personas no cultiva tales sentimientos amplios. Están inmersas en preocupaciones relacionadas con ellas mismas y sus familias. Deberían trascender tales sentimientos estrechos y tener en cuenta a la sociedad en su conjunto. Deberían considerar el servicio a la sociedad como servicio a Dios. La enfermedad y el remedio Los devotos extranjeros que han venido aquí son personas adineradas. ¿Por qué han venido? Ellos son como los pacientes que van a un hospital para tratar sus enfermedades. Todos ellos sufren de algún tipo de enfermedad, mental o física. Todos son víctimas de algún tipo de enfermedad mental. Todos ellos han venido para recibir la medicina de la paz, la alegría y la felicidad. ¿Dónde se obtiene esta paz? No se la puede obtener afuera. Está dentro de uno. La enfermedad ha surgido adentro debido a las malas cualidades. La salud física, mental y espiritual de cada persona es arruinada por las malas cualidades, los malos pensamientos y los malos sentimientos. Por ende, cultiven buenos pensamientos, buenos sentimientos y buenas actitudes. Expulsen cada mal pensamiento en cuanto surja en la mente. A ustedes no les agrada la comida que no es sabrosa. ¿No deberían impartirle dulzura a sus vidas, que se extienden por varias décadas? ¿Cómo le imparten esa dulzura? A través de la constante contemplación de Dios. La vida se vuelve gustosa a través de los buenos pensamientos y las buenas acciones. Todos aquellos que desean seguir la senda espiritual deben comenzar por librarse de los malos pensamientos y las malas prácticas y comenzar a transformar sus vidas. Las personas se preguntan: “¿Cómo hemos de cultivar una actitud amplia?”. La respuesta es: “Eliminen las barreras artificiales que han levantado entre ustedes y otros”. Estas barreras crean lealtades estrechas y limitadas y evitan que ustedes disfruten de la bienaventuranza que todo lo abarca. Amplíen su horizonte. Expandan su visión. Éste es el verdadero ejercicio espiritual para ustedes. La devoción de los artistas extranjeros Durante los últimos tres días, devotos de muchos países han presentado un programa maravilloso de una naturaleza que no puede verse en ningún lugar del mundo. Ellos no hubieran venido por invitación de ningún gobierno. Incluso si lo hubieran hecho, ustedes no habrían experimentado la clase de bienaventuranza que han disfrutado aquí. Esto es un ejemplo de la relación entre un objeto y su imagen. Debido a la bienaventuranza dentro de los artistas, ellos pudieron generar esa bienaventuranza en el público. Ellos han venido desde sus respectivos países llenos de devoción y, en su canto y su danza, se olvidaron completamente de sí mismos. Esta clase de actuación no sería posible por parte de artistas que esperaran una retribución. Los devotos no vinieron meramente con su arte, sino que vinieron con sus corazones. Su “arte” está lleno de “corazón” (1) . Algunos de ellos no eran conscientes de sus cuerpos durante las actuaciones. Habían olvidado su país de origen, fuera Rusia, América, Alemania o África. Esto es verdadero Samadhi (el estado de éxtasis espiritual). Samadhi no es entrar en trance o en algún estado de inconsciencia. Estos pueden ser causados por la histeria o alguna travesura de la imaginación. Samadhi significa ecuanimidad, olvidar la conciencia del cuerpo y estar inmerso en Ananda (bienaventuranza). Estos devotos demostraron este Samadhi y compartieron su bienaventuranza con otros miles. No sólo experimentaron esta bienaventuranza ellos mismos, sino que la compartieron con todos. ¿Puede haber tapas (ascetismo) más grande que éste? ¿Qué Sadhana más grande necesitan? “Uddharet Atmana-Atmanam”, dice el Upanishad: Elévense a sí mismos y compartan esa experiencia con otros. La adhesión a la tradición por parte de los artistas extranjeros Esos artistas se han adherido estrictamente a las tradiciones artísticas de sus respectivos países. En la danza japonesa de ayer, el sacerdote (un anciano) parecía estar temblando. Él posee toda la fuerza, pero cuando se acercaba al templo y al emperador, él mostraba extrema humildad y reverencia. Ellos practican esta humildad suprema. Económicamente y tecnológicamente, Japón es un país sumamente avanzado. Sin embargo, ¡vean la humildad y la disciplina que ellos muestran! Miren a los rusos. Entre los rusos, hay una tendencia a la “prisa”. Sin embargo, ¡qué completo olvido de sí misma mostró la dama mientras cantaba y danzaba! ¿Qué éxtasis en su corazón la hizo experimentar tal dicha? Ella estaba completamente perdida en su canción y su danza. Nadie puede decir qué clase de experiencia puede uno tener en cierto lugar, en cierto momento y en cierta situación. En suma, ¡qué transformación se ha producido en todos los que vinieron para el Festival Mundial! Ellos vinieron por primera vez, pero la transformación que ha tenido lugar en ellos no puede verse en muchos que han estado viniendo aquí por años y años. Muchos de ustedes hay escuchado incontables discursos y han leído muchos libros. ¿Pero cuál es el Las vidas de estos devotos extranjeros parecen ejemplares. Aunque han aprendido poco, la dicha que obtienen de ello es grande. Esto es lo importante acerca de ellos. Hay muchos aquí que saben mucho pero practican muy poco. Cada devoto debe aspirar a la amistad con Dios ¿De qué sirve toda la lectura de las escrituras y las epopeyas? Muy poco es puesto en práctica. Los devotos extranjeros sólo conocen unas pocas cosas. Un artista norteamericano declaró: “Baba es mi gran amigo”. Esto significa que él había desarrollado esta actitud de amistad incluso antes de venir aquí. ¿Cómo lo logró? La amistad con el Señor es una de las nueve formas de devoción. Comenzando con escuchar la gloria del Señor, la amistad constituye la penúltima etapa antes de Atma-nivedanam (la entrega completa al Señor). Cada devoto debe aspirar a alcanzar la etapa de sneham (amistad). ¿Qué clase de amistad es? No es algo nuevo. Es una vieja amistad. Sólo tal amistad puede producir familiaridad e intimidad con el Señor. Ustedes mantienen relaciones formales con un amigo. Sin embargo, debido a que Dios es un antiguo amigo, el devoto puede experimentar una intimidad sin límites. Cuando reconocen esta verdad, pueden comportarse con naturalidad y libertad hacia Dios. Ustedes son libres de confesarle sus errores a tal amigo. Tienen que recibir Su consejo. Entonces sus corazones pueden ser purificados. Ofrecerle al Señor sus corazones manchados es como presentar un billete sucio en el Banco de Reserva para obtener uno nuevo. El Banco de Reserva puede aceptar un billete que otros no aceptarán. Sólo Dios puede aceptar eso y reemplazarlo por algo nuevo. Por lo tanto, ofrézcanle todas sus malas cualidades a Dios y reciban de Él todas las buenas cualidades. No les pasen sus malas cualidades a otros. Tienen que ofrecerse a sí mismos a Dios ¿Qué es lo que tienen que ofrecerle a Dios? No una hoja, una flor, un fruto o agua bendita. Tienen que ofrecerse a sí mismos a Dios. Entonces se vuelven uno con lo Divino. Eso es lo que Dios desea de ustedes. En lugar de tomar conciencia de esta verdad sublime, las personas tratan de ofrecerle su cabello a Sri Venkatesvara para obtener favores insignificantes. ¿Qué es lo que le falta al Señor Venkatesvara? ¿Acaso el Señor necesita el cabello crecido de ustedes? ¿Qué es lo que necesita el Señor? En la parte superior de la cabeza ustedes tienen cabello oscuro. Eso representa el tamo-guna, la cualidad del letargo y la ignorancia. Aquellos que van a Tirupati deberían ofrecerle a Dios su Tamo-guna y obtener Satva-guna. Comprendan que no hay nada de ustedes que puedan ofrecerle a Dios. Todo aquello de lo que disfrutan viene de Él. Desarrollen esta convicción. Consideren que todo lo bueno o lo malo que les ocurre viene de Dios. Lo que consideran malo quizás sea como una medicina amarga prescrita por un médico para el bien de ustedes. Consideren que todo lo que ocurre, bueno o malo, placer o dolor, es para el bien de ustedes. Sólo entonces serán capaces de cultivar sus buenas cualidades. ¡Encarnaciones del Amor! Dondequiera que estén, en cualquier situación en que se encuentren, consideren que sus corazones son un Océano de Leche, la morada de Dios. Dios es omnipresente. Cuando vivan con esta fe, no habrá nada más grande que eso. Los devotos extranjeros que permanecieron aquí durante los últimos tres días han convertido sus corazones en un Océano de Leche y han invitado al Señor a reclinarse en él. Los otros devotos deberían aprender de ellos. El mundo vendrá a Sai No consideren a Sai Baba una mera figura de un metro sesenta de alto. Su Presencia se sentirá en todo el mundo. Esperen y verán. En pocos días el mundo entero vendrá aquí. Por lo tanto, al menos a partir de ahora hagan el mejor uso de la oportunidad que han tenido y esfuércense por redimir sus vidas. Debido a la proximidad, ustedes han tendido a darme por sentado. Yasoda se dejó engañar de un modo similar acerca de la verdadera naturaleza de Krishna y no pudo comprender por qué Él prefería la mantequilla que guardaban las Gopikas a la que ella le ofrecía. Krishna sólo podía ser atado con la cuerda de la devoción. Yasoda sentía un afecto maternal pero no la intensa devoción de las Gopikas. El sentido de dualismo debe desaparecer y debe haber una identificación total con lo Divino. En esta sagrada ocasión, devotos de muchos países han deleitado a todos los presentes con su presentación de la cultura artística de sus respectivos países. Dondequiera que vayan no abandonen su cultura tradicional. Los devotos extranjeros que vienen aquí se adhieren a su cultura. Sin embargo, los bharatiyas que van al exterior olvidan su antigua cultura. Lo que es peor, ellos hasta olvidan su lengua materna. Después de años vividos en Bharat, en un corto período de estancia en los Estados Unidos ellos se vuelven adictos a la lengua norteamericana. Cuando les pregunto en telugu a jóvenes que regresan después de una breve estadía en los Estados Unidos qué están haciendo aquí, ellos dicen: “No sé hablar el telugu”. ¿Qué es lo que han aprendido? Si han olvidado su lengua materna, ¿recordarán a su madre? Las naciones son muchas pero la tierra es una Rama declaró: “La madre y la Madre Patria son más grandes que el cielo mismo”. Por lo tanto, dondequiera que vayan, no olviden sus antiguas tradiciones. Esto también se aplica a las personas de todos los países. Al mismo tiempo, la unidad debe ser cultivada. “Las naciones son muchas, la tierra es una. Los seres son muchos, pero el aliento es uno.” Se ha de reconocer esta verdad. Todos los recursos de la Naturaleza, como el aire, están disponibles para todos más allá de nacionalidad, credo o raza. Ésta es la unidad en la diversidad que se ha de experimentar. De la unidad viene la pureza. Todos deben procurar vivir como hermanos y hermanas. Nadie debe criticar a ninguna nación, fe o cultura. Cuando cultiven esta amplitud mental, su cultura será respetada por otros. Éste es el espíritu de unidad que el mundo necesita hoy. Si los bharatiyas olvidan su cultura, ellos serán culpables de traición espiritual. Vean cómo los chinos (de Malasia) realizaron sus danzas únicas. Los jóvenes tenían esta intensa dedicación por su cultura. Los indios que van al exterior tienden a despreciar su cultura como una superstición. Una vez el Prof. Max Mueller, intentando que un funcionario público indio llamado Chaturvedi le diera el significado de un pasaje Védico, descubrió que éste desconocía totalmente los Vedas y no tenía respeto por ellos. El Prof. Max Mueller se entristeció al comprobar que alguien nacido en la India, con el nombre de Chaturvedi, tuviera tan poco respeto por los Vedas. Los bharatiyas deben tomar conciencia de cuánto respeto muestran los extranjeros por nuestra cultura y nuestra herencia espiritual. La nación está descendiendo moral y espiritualmente. La primera necesidad es cultivar el respeto por uno mismo. Todos deben defender el nombre y la fama de Bharat. Para esto, ellos deben respetar los Vedas y tratar de adquirir el conocimiento de los Vedas. Cuando menos, deberían considerar a Dios el Morador interno del corazón. ¡Encarnaciones del Amor! Consideren al corazón como el templo de Dios y traten de mantenerlo puro e inmaculado. Canten el nombre del Señor para apartar todos los malos pensamientos e impulsos. (1) N. de la t.: Juego de palabras entre “art” (arte) y “heart” (corazón) que tienen una pronunciación similar. Traduccion Mercedes Wesley |