Discursos dados por Sai Baba
{SB 12} (54 discursos 1973 a 1974)
08. 22/03/73 Eviten al villano
( Impreso en castellano en Mensajes de Sathya Sai, Tomo 08 cap. 38 )
Eviten al villano
22 de Marzo de 1973
Nueva Delhi
A menudo les digo a los jóvenes estudiantes universitarios que pueden adorar a Dios como una imagen. Pueden albergar el concepto de que una piedra tallada o una pieza de madera es Dios. Pues, en ese proceso, están elevando a aquella sustancia a ese estado elevado. Pero, Yo también les advierto que no deberían degradar a Dios al estado del papel, de la madera o de la piedra. Por supuesto, Dios está inmanente en cada átomo y célula del Universo, y si ustedes son capaces de reconocerlo y adorarlo en ello, realmente están bendecidos.
No avancen hacia Dios a través del mundo a vuestro alrededor.
Confirmen en vuestra fe que son el Atma, el cual es la Chispa Divina en ustedes, y entonces trasládense al mundo como héroes a quienes el éxito no puede estropear ni la derrota puede descorazonar. No es Mi intención virar los hombres hacia Dios, pues ya tienen a Dios residiendo en ellos: No hay necesidad de avanzar hacia Él o de llamarlo para que venga desde algún lugar afuera de ustedes. Háganse conscientes de Él como vuestro motivador interno (Amtharyamin), eso es suficiente.
Caminen hacia afuera, con la convicción de que son el Atma; entonces adorarán al mundo y no se aprovecharán de él.
Están inextricablemente atados con todos los demás.
Mediante la constante contemplación, deben darse cuenta de que el mundo es el Cuerpo de Dios. Y ustedes son una célula en ese Cuerpo. La prosperidad del mundo es vuestra prosperidad; sientan así, actúen en ese espíritu; piensen en esos términos. Eso es verdadera espiritualidad. El Saadhak (aspirante espiritual) no puede separarse del mundo y escaparse a la soledad, pues el mundo lo seguirá hasta la cueva más profunda o al bosque más oscuro. El Saadhak puede reclamar progreso sólo cuando haya establecido en sí mismo la fe en la unidad de la humanidad. Ishwarah sarvabhoothaanaam hriddhese, Arjuna, thishthathi, dice el Geetha: “Oh, Arjuna, el Señor está sentado en el corazón de todos los seres”.
Ishaavashyam idham sarvam: “Todo esto está envuelto en Dios”. Cada cosa y cada ser no son sino olas en la superficie de un océano vasto ilimitado atemporal, el cual es Dios. Las olas pertenecen al océano y dependen de él para su existencia individual; pero el océano no tiene necesidad de las olas. Por lo tanto, ustedes están inextricablemente atados a todo lo demás y a todos los demás. El mundo inevitablemente reaccionará contra ustedes; reflejará vuestros pensamientos y planes; resonará con vuestros gritos y credos. Vuestros pensamientos, palabras y acciones configurarán a otros y los de ellos los configurarán a ustedes. Es vuestro debe ser buenos, hacer el bien y ver el bien. Esa es la forma de hacer bueno al mundo y de ser buenos ustedes mismos.
Estas ideas y orientaciones son los principales componentes de la Cultura India; pero en la actualidad sólo son honradas en la literatura. Actos indignos y que dañan el justo nombre de la cultura india son llevados a cabo con orgullo por parte de los hijos e hijas mismos de Bharat. Los templos están descuidados; los lugares de peregrinaje están desiertos; la idea misma de santidad es ridiculizada. A las reglas elementales de conducta social y de comportamiento individual, como reverenciar a los padres y mayores, reverenciar a los maestros e invitados, hablar la verdad y transitar el sendero de la rectitud, se les hace caso omiso como innecesarias restricciones a la libertad individual.
Las personas obedecen a los caprichos del momento.
Hábitos de vida incontrolados, comportamiento social desenfrenado, son alabados como signos de libertad. Sólo es libertad para deslizarse en la forma animal desde la cual el hombre se ha elevado. El sistema de educación no se ha preocupado por inculcar las ideas y los ideales elevadores que la Cultura India alimentó por siglos y, así, la juventud está siendo guiada hacia los villanos de licencia sensual. Las personas obedecen a los caprichos y antojos del momento; no se demoran en discernir. Cuando se hablaba de los ideales del desapego y de la simplicidad como válidos y valiosos, la India fue realmente fuerte y feliz, pero, ahora, el carácter ha perdido prioridad en el sistema educativo. Los animales tienen sus estaciones y razones para su comportamiento, pero el hombre no tiene en cuenta a éstas. ¿Qué le ha sucedido a la sabiduría consagrada en nuestras Escrituras? ¿Qué le ha pasado a los nobles ejemplos de los grandes hombres y mujeres de las epopeyas y puranas?
Desde que son ignorados, la vida se ha hecho seca, estéril y miserable. Restáurenlos en la estimación de las personas y sigan sus enseñanzas; la vida se hará nuevamente útil y llena de propósito.
Hoy tenemos enfrentamientos en todas partes: en el hogar, entre marido y mujer; en la escuela, entre maestro y alumno; en la sociedad, entre grupo y grupo. ¡Esto de verdad es deterioro! La paz y la armonía entre los miembros de la misma familia son la base para la paz en el país. El individuo debe estar en paz consigo mismo. Al igual que el coordinado esfuerzo de todos los órganos del cuerpo es esencial para la vida saludable, la coordinación entre pueblo y pueblo es esencial; así también, entre estado y estado, y nación y nación. Pero la verdad es que si sólo abren vuestro ojo Interior y visualizan, hay una sola nación, la nación llamada “humanidad”; hay sólo una religión, la religión del Amor.
La divinidad es inherente a cada ser humano.
Siéntanse felices de que esta sea vuestra madre-patria; el amor por el país es la base sobre la cual ustedes pueden construir el amor por la comunidad del mundo. El amor expande; no se limita a las fronteras. Amen a vuestra lengua materna; entonces, podrán descubrir que todos los idiomas son tan dulces como el vuestro, pues un idioma es tan dulce como las lenguas de los oradores.
Quiero que reconozcan que el cuerpo humano se les ha entregado para que puedan utilizarlo para el bien del país donde vieron por primera vez la luz y saborearon el amor; y por el bien de la cultura que vuestro país ha atesorado por siglos, para que así puedan crecer bajo su sombra. Si descuidan las raíces, ¿cómo pueden cosechar los frutos? Consideren, ¿qué es lo que nos da seguridad y certidumbre en esta enorme estructura, este Vijnana Bhavan (la inteligencia; el conocimiento superior, racional, discriminatorio)? Ahora sólo le prestamos atención a artículos superficiales como los asientos, los almohadones, el balcón, los sistemas de audio, etc. Pero, a la base escondida en el suelo, la pasamos por alto como fuera de la vista. Asimismo, también la cultura de Bharat es la base de nuestra prosperidad, paz y progreso.
El mundo entero es Un Único Árbol; los diferentes países son sus ramas; su raíz es Dios, los seres humanos son las flores.
La felicidad es el fruto y la Bienaventuranza de la Auto-realización es el dulce jugo de la misma.
¿Cómo entonces puede alguien justificar su ira contra otro hombre, o estar celoso debido al otro? Todos son alimentados por la misma savia; todos comparten el mismo Sol; todos son Divinos. La Divinidad no es algo separado y aislado, que tiene que ser ganada mediante un duro trabajo. Es inherente a cada hombre, mujer y niño. A través de algunas sencillas prácticas, y mediante algún pequeño esfuerzo, pueden aprovechar los manantiales de Divinidad en vuestros corazones.
Algunas personas Me han preguntado si el Sadhana (disciplina espiritual) tiene que complementarse con el estudio y la indagación.
Lean los textos necesarios, realicen los ejercicios prescriptos en lógica ¡no son éstos suficientes, preguntaron! Es como preguntar, hemos puesto cables para traerle corriente eléctrica a cada parte de Vijnana Bhavan: ¿no es eso suficiente?
¿Por qué lamparitas, tubos y ventiladores? ¡El Sadhana es la lamparit
a, el interruptor, el ventilador! La inyección de insuli na para el paciente diabético es la “investigación”; la restricción en los hábitos alimenticios es el “Sadhana”. Se requiere de ambos la investigación y el Sadhana, para descubrir la Divinidad latente en ustedes y para manifestarla.
Esto significa que deben dedicar algún tiempo cada día para el estudio y para el Sadhana. Ahora están desperdiciando el tiempo hasta la noche tarde, en clubes y compañías frívolas. De ser pasada con Dios una porción de ese tiempo, les conferirá valiosos resultados. Esta madre-patria les ha dado una cultura que está atrayendo a personas distraídas de todas partes del mundo. Sean agradecidos; estudien la cultura; practiquen las disciplinas que ella establece. Sirvan al pobre y al necesitado, y a aquellos que se ganan la vida mediante un duro trabajo.
Nueva Delhi, 22/3/1973