Manasa bhajare guru charanam, dustara bhava sagara taranam. Apelé a todos aquellos que sufrían en la interminable rueda de nacimiento y muerte para adorar los pies del Guru, el Guru que se anunció a Sí Mismo, quien había regresado para tomar sobre Sí la carga de aquellos que encuentran refugio en Él. Ese fue Mi primer Mensaje a la humanidad. No necesito sus guirnaldas de flores y frutas, cosas que compran por unas pocas rupias; no son enteramente de ustedes. ¡DenMe algo que sea suyo, algo que sea limpio y fragante con el perfume de la virtud y la inocencia, y lavado en las lágrimas del arrepentimiento! Las guirnaldas y frutos que traen son una exhibición de la devoción; ¡los devotos más pobres que no pueden permitirse traerlas se sienten humillados e incapaces por no poder demostrar su devoción como ustedes! Instalen al Señor en su corazón y ofrezcan a Él los frutos de sus acciones correctas y las flores de sus pensamientos y sentimientos más profundos. Esa es la adoración que más Me gusta, y la devoción que Yo más aprecio. Sathya Sai Baba, discurso Vijayadasami, 1953.