El simple hecho de tener una forma humana no hace que uno sea un ser humano; lo que importa es la conducta y el comportamiento, ¿no es así? De la misma manera, la mera adquisición de conocimiento libresco no hace que uno sea verdaderamente educado. Tal educación mundana es de naturaleza negativa. Hay que distinguir entre educación y educare. La educación se limita a los niveles físico y mental. Mientras que la educación está orientada a la información, educare está orientado a la transformación. Así como los ríos Krishna y Godavari tienen su origen en el océano, la educación tiene sus raíces en educare. El conocimiento físico y mundano corresponde a la educación. Educare está relacionado con nuestros sentimientos internos y la pureza de corazón. Nuestro “matta, patta y batta” (hablar, cantar y forma de vida) debe originarse en el corazón. Esa es la esencia de educare. Incluso si adquieren varios títulos de grado, si carecen de pureza de corazón, no pueden ser llamados verdaderamente educados. Discurso del 14 de enero de 2006.