Discursos dados por Sai Baba
{SB 21} (34 discursos 1988)
14. 29/05/88 La conquista del deseo
( Impreso en castellano en Mensajes de Sathya Sai, Tomo 21 cap. 14 ) La conquista del deseo 29 de Mayo de 1988 ¡No vayas tras la riqueza y las posesiones, oh, Hombre! Con sentido común, controla tus deseos. Lo que obtienes es el resultado de tus acciones. Con los medios correctos, regula tu mente. Canta el nombre de Hari y Govinda. ¡Oh, hombre tonto! Cuando la Muerte golpee a tu puerta tus parientes y tu erudición no te servirán de nada. ¡Encarnaciones del Espíritu Divino! Trishna posee dos significados: Deseo y Sed. Es natural que en la vida diaria las personas deseen ciertos artículos de primera necesidad y algunas comodidades. Entre estos artículos tres son esenciales: el alimento para la subsistencia, prendas para vestirse y un lugar donde refugiarse. Sin embargo, hay dos clases de deseos: uno es natural, el otro es un deseo excesivo y mal dirigido. “Yo quiero una casa” es un deseo legítimo y uno debería intentar tenerla. Pero poseer dos o más casas implica codicia. Hoy la codicia prevalece entre los hombres más que el deseo de artículos de primera necesidad, y, como resultado, el hombre siente pena y preocupación. Desconoce lo que es el contento. Está inmerso en la insatisfacción debido a los deseos insaciables. El otro significado de la palabra Trishna es sed. Cuando uno tiene sed, ha de beber agua. ¿Cuándo terminará la sed? La sed no terminará en tanto dure la vida. Incluso en el momento de la muerte las personas sienten sed. ¿Cómo ha de saciarse la sed (de cosas materiales)? Es posible liberarse de grilletes de hierro con el correr del tiempo cuando éstos se oxidan, pero no es fácil librarse de trishna (el deseo). Trishna es la causa de los deseos ilimitados. Si los deseos se satisfacen, ahamkara (el ego) se infla. Si no se satisfacen, se desarrolla el odio. El sadhana constituye la Riqueza Divina Hay tres puertas por las que el hombre entra al infierno: Kama (lujuria), Krodha (odio) y Lobha (codicia). Hay una tendencia a perder el control de los deseos. Por eso es esencial tratar de controlarlos en la medida de lo posible. El proceso de controlar los deseos se llama sadhana. Literalmente sadhana significa el esfuerzo que ustedes realizan por obtener el objeto de su deseo o alcanzar la meta que tienen en vista. Así, el sadhana es el medio principal para lograr la meta u objetivo. Un segundo significado del término es Sa-dhana, o sea, la riqueza asociada con la Divinidad. Dhana es descrita de tres formas: como Aishwarya, Sampadha y Dhana (riqueza material). Todas estas descripciones se refieren a la misma cosa. La riqueza no los acompañará cuando abandonen el cuerpo. Si se pierde la riqueza, puede ser recuperada. Si se pierde la fuerza, esta puede recobrarse; pero si se pierde la vida, no se la puede recuperar. Por eso, mientras la vida continúe, uno debe esforzarse por adquirir la riqueza divina, que es imperecedera y eterna. La conducta de ustedes constituye esta riqueza divina. Sólo por el modo en que viven pueden adquirir esta riqueza divina. Cultiven buenas cualidades Sólo la buena conducta es la verdadera riqueza. Solamente las buenas cualidades constituyen el verdadero Aishwarya (tesoro). Un carácter intachable expresado en forma de una vida pura y perfecta constituye la mayor riqueza que uno puede poseer. La buena conducta, las buenas cualidades y un carácter ejemplar son lo más valioso que se puede tener. Sin embargo, hoy los hombres han abandonado estas cosas y buscan los bienes mundanos. Inmersos en sus propios intereses, creen que llevan vidas piadosas. La Divinidad no puede ser alcanzada con esas ilusiones. Todas las enseñanzas que el hombre escucha, los libros que estudia y la educación que recibe, sólo le sirven para alimentar estas ilusiones y no para buscar a la Divinidad. Para realizar a la Divinidad, hay que librarse de estas ilusiones. Hoy se dice que la educación avanza a pasos agigantados. ¡Estudiantes! No se perderá gran cosa si no reciben ninguna instrucción. La educación actual apunta sólo a preparar a los estudiantes para propósitos mundanos. ¡Piensen en los grandes sabios y hombres célebres del pasado que no tuvieron esta educación pero que llevaron vidas tan ejemplares! ¿Qué grandes cosas van a lograr si estudian durante todas las horas de vigilia, simplemente para ganarse la vida, mientras olvidan a Dios? Los iletrados son mejores que los “educados”, que están arruinando al país. Los instruidos son los responsables de haber hundido al país en el lodazal de la insolvencia. Tal vez los iletrados no le presten ningún servicio positivo al país, pero no le causan daño. Sin embargo, las personas con instrucción le están haciendo más daño que bien a la nación. Es mejor no recibir una educación tan nociva antes que permitir que ella cause estragos. Descubran su propia y verdadera naturaleza Hoy el hombre está tratando de dominar todos los tipos de conocimiento, pero es incapaz de descubrir su propia y verdadera naturaleza. Esto manifestó Prahlada a Hiranyakasipu, su padre, cuando le dijo que, aunque Hiranyakasipu había conquistado todos los mundos, no había dominado sus sentidos. Conquistando los mundos, uno puede convertirse en el máximo gobernante, pero quien ha dominado sus sentidos tiene supremacía sobre todos los gobernantes. Es el rey de reyes, el hacedor de reyes. La verdadera educación debería infundir humildad en el estudiante. Sin humildad la educación carece de brillo. La humildad saca a relucir las verdaderas cualidades de un hombre educado. Proclama las virtudes de una persona. La veneración por los ancianos, el cuidado amoroso de los padres, el discernimiento entre lo correcto e incorrecto, la adoración del Señor: estos son los signos de humildad en una persona educada. Esta es la esencia del buen carácter, la fragancia de la vida humana. Deberían comprender que Quien les ha dado este nacimiento humano seguramente los cuidará de alguna forma. No es preciso que busquen obtener riquezas, posición, fama o poder. Si cumplen con su deber, todo esto les llegará espontáneamente. Entronicen en el corazón el amor a Dios. Una vez que atesoren ese amor en su interior, el mundo entero será de ustedes. Si son esclavos del deseo, serán esclavos del mundo. Si han dominado el deseo, el mundo estará a sus pies. La verdad y el amor son la esencia de los sastras Reconozcan la verdad y continúen sus estudios de acuerdo con este reconocimiento. Sin importar la erudición que uno pueda adquirir, sin importar los títulos que uno pueda ostentar, sin importar el poder o el cargo que uno pueda ejercer, sin importar el japa o la adoración que uno pueda realizar, uno no puede alcanzar la Liberación si no siente un profundo amor por Dios. Por lo tanto, cultiven primero ese amor. El amor lo es todo. La Verdad y el Amor deberían considerarse los dos ojos de una persona. Si tienen estos dos ojos, pueden dominar el mundo. La Verdad y el Amor son como la esencia destilada de todos los sastras. El Amor es la quintaesencia de todos los Dharma sastras; es la meta de todas las religiones. Si beben el néctar del Amor y la Verdad, no necesitarán ningún otro alimento. El Amor y la Verdad no pueden ser enseñados por los gurús o aprendidos de los libros. Pueden estar expuestos en grantas (libros), pero ustedes no experimentarán su gandham (fragancia). Sólo se adquieren viviéndolos. Esfuércense por amar a todos. Si han de ganarse el amor del Señor, tienen que amar a todos. La mejor forma de amar a Dios es amar a todos. Llenen su corazón de Amor Divino Amen y sirvan a todas las personas. Si odian, critican y sienten celos de todos, ¿cómo podrían experimentar la gracia? Sólo si hay agua en el tanque, saldrá agua de la canilla. Si el tanque está seco, ¿cómo esperan obtener agua? Si ll Sea uno devoto o creyente, aspirante o escéptico, sus acciones determinarán qué recompensas o castigos obtendrá en la vida. A veces ustedes piensan: “El Señor me ha protegido de esta forma o me ha castigado de esta manera”. No es el Señor quien los ha protegido. Esa no es la función de la Divinidad. Sus plegarias son las que los han protegido. Sus buenas acciones los han salvado. Su buena conducta es su escudo. Si han experimentado dificultades, calamidades o aflicciones, ellas son consecuencia de sus pensamientos y acciones. Por lo tanto, cualquier cosa que le ocurre al hombre, buena o mala, es el resultado de sus propias acciones. Dios es un testigo. La corriente fluye a través de un cable eléctrico. Cuando encienden la luz, esta ilumina todo; cuando la apagan, deja de alumbrar. Sin embargo, no es la luz la que viene o se va. Es la operación del interruptor lo que enciende o apaga la luz. La corriente les brinda un servicio y también los castiga. Dios es la causa de la creación, protección y fusión. Del mismo modo, la corriente tiene los poderes de la creación, la protección y la destrucción. ¿Cómo se crea la corriente? Se obtiene energía de un generador, que transmite electricidad a las lámparas para que se enciendan, a los ventiladores y a otros aparatos para que funcionen. La corriente es una, pero los usos son muchos y diversos. En todas estas formas, la corriente cumple una función creativa. También protege al hombre de diversas formas a través de la luz, el ventilador, etc. Sin embargo, si por un sentido de gratitud equivocado ustedes tocan un alambre electrificado, recibirán una descarga que hasta podría resultar fatal. Así, la corriente también tiene la capacidad de castigar. Dios está presente en ustedes como Prajña Dios actúa como creador, protector y destructor. Deben expresarle gratitud a Dios con acciones, no con palabras.Tienen que aprender a usar correctamente las cosas que se les proporcionan. Dios es omnipresente. Está dentro de ustedes. Su buena conducta, en la forma de Dios, les da protección. Él está presente en ustedes como Prajña (Conciencia Integrada Constante). Los Vedas han declarado: “Prajñanam Brahma” (“La Conciencia es la Realidad Suprema”). Si los estudiantes se preguntan “¿Dónde está Dios?”, obtendrán una respuesta en la plegaria que pronuncian antes de cada comida. Ustedes recitan el mantra “Brahmarpanam” y el sloka “Aham Vaisvanaro Bhutva Praninam deham Asritah”. El último sloka significa: “Yo (la Divinidad) he entrado en todos los cuerpos de los seres vivientes en la forma de Vaisvanara”. Esto quiere decir que el Señor, que está dentro de ustedes, les está otorgando protección (al digerir el alimento que ingieren y nutrir el cuerpo entero). Si ustedes actúan contra los dictados de su corazón y su conciencia, Dios los castigará. Todo lo que ven afuera es sólo el reflejo de su ser interno. Lo bueno o lo malo que experimentan es el reflejo de sus sentimientos. No se engañen pensando que por haber ofrecido adoración en un templo han obtenido la gracia de Dios. Si adoran a Dios, pero atormentan a las personas que los rodean, ¿obtendrán acaso la gracia Divina? Sus plegarias arrojan un saldo positivo en el balance espiritual. Si les causan daño a las personas, obtienen un saldo negativo. El resultado del más y el menos es cero. Por lo tanto, es muy importante que desarrollen la conciencia de la Divinidad presente en todos los seres. Practiquen las enseñanzas de las escrituras Hoy el Bhagavad Gita es predicado en todas las calles. Se lo venera cual libro sagrado. Del mismo modo, el Corán, la Biblia y otros textos son adorados como libros espirituales. ¿Pero se está haciendo algo para practicar lo que enseñan los libros sagrados? Muchas personas eminentes han afirmado que creen en la Paternidad de Dios y la Hermandad del Hombre. La Hermandad del Hombre es considerada un gran ideal. Sin embargo, el Gita ha presentado un ideal más elevado. La hermandad es vista como una gran cualidad, pero sabemos que hay hermanos que riñen, llevan sus diferencias hasta los tribunales y arruinan a sus familias. ¿Cómo puede el simple hecho de ser hermanos considerarse una gran virtud en sí misma? El Gita recomienda el “Ekatma bhava”, el sentimiento de que “Un espíritu habita en todos los seres”. Declara que el Atma que reside en todos los seres es una y la misma. “Eko vasi bhuta antaratma”, declara el Gita (“El Espíritu que mora en el interior de todos los seres es Uno”). Eso no es todo. También sostiene que todos los seres humanos del mundo son un fragmento de la Divinidad. ¿Cuántos son conscientes de esta verdad y cuántos viven de acuerdo con esta declaración? En verdad, muy pocos. A pesar de la prodigiosa difusión del Gita, ¿cuántos practican sus enseñanzas? ¿Cuántos llevan vidas ejemplares? Pocos. En esta situación, es suficiente si se adhieren a una cosa. No necesitan estudiar ningún libro para contemplar a Dios o ganarse Su amor. La espiritualidad es el único camino hacia la pureza No hay nada malo en estudiar las escrituras, pero tienen que poner en práctica sus enseñanzas. El estudio continuo sólo llena el cerebro de aserrín. Estudiar los puntos de vista de diferentes autores lleva a la confusión. El primer requisito es fortalecer la fe en el propio ser. Aférrense a una creencia y sigan una senda. Si perseveran, la Divinidad se manifestará espontáneamente a su debido tiempo. Los estudiantes tienen que cultivar la humildad junto con la educación y observar Samskaras (conducta recta). Sólo cuando el corazón es purificado a través de Samskaras, la educación también estará saturada de pureza. La espiritualidad es el único camino hacia la pureza. Discurso pronunciado en Trayee Brindavan, el 29 de mayo de 1988. |