Discursos dados por Sai Baba
{SB 18} (31 discursos 1985)
18. 28/08/85 El Camino Real hacia Dios
( Impreso en castellano en Mensajes de Sathya Sai, Tomo 18 cap. 18 ) El Camino Real hacia Dios 28 de Agosto de 1985 Esta tierra es santa debido a muchos santos, visionarios, reyes y eruditos que han enriquecido su cultura y traído felicidad y paz a las vidas de la gente. Es una fuente de inspiración el recordar sus enseñanzas y resolver ponerlas en práctica en días establecidos para este fin. Shamkaracharya fue uno de los más grandes entre ellos. A muy temprana edad dominó las escrituras y compuso elaborados comentarios sobre los Upanishads, el Brahma Sutra y el Bhagavad Gita (los tres tratados básicos del Sanatana Dharma, la Sabiduría Eterna). Viajó a pie por toda la India, visitó los famosos santuarios y lugares sagrados y paso varios años en los Himalayas antes de su muerte a la edad de 32 años. Reveló que el mensaje fundamental de los visionarios y sabios era el no dualismo (advaita). Los axiomas védicos Aham Brahmâsmi (Yo soy lo Absoluto), Tat Tvam Asi (Eso Tú Eres o Tú Eres Eso), etc. son expresiones de la verdad que son validadas por las escrituras, la lógica y la experiencia. El individuo es igual a lo universal. Nunca hay dos; todos son Uno, la omnipresente Conciencia cósmica, el Informe, Sin Nombre, Impersonal y Sin Atributos Ser. El Hombre, la Naturaleza y Dios son Uno El no dualismo no alienta ni inspira la devoción a un Dios personal. No habría lugar para la rendición a una figura dominante. Las masas que anhelaban la remoción de una sed interna tenían que ser conducidas paso a paso. Ramanuja interpretó los textos básicos y descubrió que el hombre puede realizar a Dios por medio de la adoración, usando el don de la naturaleza como instrumento. Dios es la semilla, la concha es el hombre y la materia fibrosa es la naturaleza (como en un coco). Están íntimamente entrelazados, como los miembros en el cuerpo son partes con sus propias características peculiares. El hombre, la naturaleza y Dios son Uno Sin Segundo (advaita) en un sentido especial y único (visishta). Así, la filosofía de Ramanuja es llamada no dualismo calificado. Sin embargo, el no dualismo calificado era una experiencia no fácilmente accesible para los hombres ordinarios. Ellos querían poner su fe en un Dios compasivo, omnisciente, omnipotente a quien pudieran orar y ofrecer su vida y su amor. Madvacharya, cuyo nombre original era Anandathirta, declaró que el hombre es totalmente distinto de Dios, que el hombre no es ni Dios ni divino. El destino más alto del hombre es servir a Dios, como Radha adoraba a Krishna. El ansia por el servicio, el anhelo por ver y llenarse los ojos con la belleza y majestad del Señor – ese el el sadhana más potente. El aspirante preferiría más ser una hormiga que mordisquea moléculas de azúcar que volverse un trozo o una gran montaña de azúcar. Este proceso de devoción y dedicación es el camino real, el camino más suave hacia el éxito espiritual. Este día, la gente del Estado Kerala, dondequiera que se encuentren, experimentan este sagrado proceso. La región de Kerala está hoy, el día del festival de Onam, refrescada por las lluvias de los monzones; las selvas, tierras bajas y la costa están brillantes y pulidas; la tierra tiene una alfombra de doradas flores. El país está resplandeciente con una atmósfera de adoración. Una maravillosa historia explica esta expectativa, esperanza y gratitud general. El dorado imperio de Bali, el Emperador Hiranyakashipu es descrito en los Puranas como un rey demoníaco. Él negaba a Dios y aterrorizaba a sus súbditos. Mientras él afirmaba que Dios no está en ninguna parte, su hijo Prahlada afirmaba que Dios está en todas partes. En consecuencia, Dios no estaba en ninguna parte para el padre mientras que estaba en todas partes para el hijo. El hijo de Prahlada fue Virochana y el héroe de la historia detrás del festival de Onam fue el hijo de Virochana. Se llamada Bali, Balichakravarti (Bali, el Emperador). Siendo el nieto del devoto Prahlada, Bali también se dedicada a la glorificación de Dios y a la elevación material y espiritual de sus súbditos. No habría traza de pobreza y mala salud en su imperio. Cada hogar estaba iluminado por la felicidad; cada día era una ocasión festiva. Él decidió celebrar un elaborado rito sacrificial llamado Vishvajit que propiciaría tanto a los dioses que, con sus bendiciones, él podría extender su beneficente reinado sobre el mundo entero. El Señor utilizó esta oportunidad para derramar su gracia sobre él. Encarnó como Vamana y prosiguió al altar sacrificial en la forma de un estudiante mendicante, acabado de iniciar a la vida espiritual. Bali se sintió feliz de darle la bienvenida. Cuando se le preguntó a Vamana qué don aceptaría, Él respondió que necesitaba sólo tres pies de suelo, medidos por Sus pies. Bali se quedó sorprendido de esta respuesta. Por un corto momento, dudó de la intención e identidad del extraño visitante. Su preceptor, Shukra, le advirtó en contra de prometer nada. Pero Bali mantuvo su palabra. Le permitió a Vamana medir Él mismo los tres pies de suelo. Por qué el Señor encarna El Señor había encarnado para bendecir a Bali, no para destruirlo. Así, una vez que hubo medido la tierra con un paso y el cielo con el segundo, Él colocó Su pie en la cabeza de Bali y aceptó al emperador como el tercer pie de suelo. Ese pie liberó a Bali del recurrente ciclo de nacimiento y muerte. Pero Bali hizo un último, persistente deseo que el Señor convino en cumplir. Él pidió, “Permíteme volver al Kerala que goberné un día al año para que yo pueda ver a la gente que amo y la tierra de atesoro en mi corazón”. Onam es ese día. La palabra shravanam, cuando es aplicada a este mes, se ha vuelto Chingom y cuando es aplicada a la estrella con la cual la luna está asociada este día, se ha vuelto Onam – Shravanam, Vanam, Onam. Bali escogió para su visita anual el día de la estrella Shravanam en el mes de Shravanam. La llegada de Bali es un día de regocijo La gente de Kerala celebra la llegada de Bali con gran regocijo. Es un día sagrado, cuando preparan deliciosos dulces y los ofrecen al Señor. Todo el mundo lleva ropas nuevas (Ona-kodi), cada hogar es decorado con festones, guirnaldas y diseños florales. La atmósfera es fragante con el incienso proveniente de cada altar doméstico. Los aldeanos pasan el día juntos en bailes y cantos. Se enciendan lámparas delante de cada hogar; son colocados en los umbrales, y llevados delante de los templos por filas de niños. La lámpara encendida simboliza el alma individual (jîva), cuyo ser no es sino un diminuto parpadeo de la Luz cósmica. Viejos y jóvenes, ricos y pobres, están todos igualmente inmersos el día de Onam en agradecida adoración al Señor y a Bali, quien se ganó la gracia del Señor sacrificando su ego. La lección que Onam imparte es: Una vida entera pasada sin devoción al Todopoderoso Señor es un lastimoso desperdicio. Librándose de la identificación con el cuerpo y sus atributos, uno debe involucrarse con el Espíritu. Sólo esto puede revelarle al hombre su realidad, el Âtma. Una vez que el núcleo átmico de uno es contactado, necesita sólo un paso más para descubrir que todo los demás tienen ese mismo Âtma como su realidad. Así, el hombre se vuelve consciente de la Unidad que es la verdad, que es Dios. El hombre está ahora sufriendo de una visión totalmente confusa de las cosas. Él cree que el hombre es real, la naturaleza es real y Dios es una invención de la imaginación. Pero Dios es la semilla que se ha expresado como la naturaleza, de la cual el cuerpo humano es una parte. De la misma forma que en cada fruta que produce el árbol está evidente la semilla, el Paramâtma (la Conciencia Cósmica) es también el núcleo de cada ser. El ser inferior o ego actúa como una niebla para esconder esta verdad, que si el hombre la conoce puede Dios existe y puede ser experimentado El oído debe estar ansioso de escuchar la gloria de Dios. La lengua debería amar sólo el sabor de Su historia. Cada acción debe ser suficientemente meritoria para ser una ofrenda a Él. A menudo les he dicho, “Vean lo bueno; escuchen lo bueno; digan lo bueno; sean buenos. Este es el camino a Dios”. A menudo añado; “No vean el mal; no escuchen el mal; no digan el mal; no hagan el mal; no sean malos. Este es el camino a Dios.” Hoy en día hay gente que afirma que no hay Dios. Pero Hiranyakashipu que pertenecía a esta categoría fue confrontado por su propio hijo quien afirmó ya como niño, que Dios existe y puede ser experimentado. Aquellos que niegan a Dios no pueden probar que Él no existe, excepto por su limitada razón y lógica. La experiencia de Dios ganada por los sabios en todas las edades y todas las tierras no puede ser desechada con la ayuda de la razón, que puede estar afectada por el prejuicio, el orgullo y hasta la mala salud. Hay muchas verdades que son demasiado estables para ser desechadas. El imán atrae al hierro, tres más tres da seis, una hoja verde de betel con cal blanca cuando se mastica con una nuez marrón produce saliva de color rojo, un retoño colgado con las raíces hacia arriba crece sin embargo hacia arriba como es su costumbre – estos hechos no pueden ser negados en absoluto. El tener conciencia de Dios, que es el propósito mismo de la existencia humana, debe ocurrir, no importa cuan largo sea el tiempo que se tome, ni la dificultad en el proceso. Cuando el corazón es purificado y la conciencia iluminada, la tarea es fácil. Mensaje del Festival de Onam para todos Dios es más diminuto que lo más diminuto. Si no pueden ver el aire que saben está alrededor suyo, ¿cómo pueden ver a Dios que es más diminuto aun? Dios es lo más vasto. Si no son capaces de imaginar al cosmos que la astronomía no ha podido desenmarañar, ¿cómo pueden ver o imaginar lo más vasto de lo más vasto? El emperador Bali, a quien la gente de Kerala dan la bienvenida en sus corazones y hogares el día de Onam, tenía una fe inquebrantable en Dios. Él servía a sus súbditos, como si estuviera comisionado por Dios (Narayana). Él ofreció a Dios todo lo que había ganado, todo lo que él era, con la mayor alegría. Él superó las nubes de ignorancia y se elevó a las alturas de la suprema sabiduría. Su ser se expandió de tal manera que se fundió en la Conciencia divina. La pureza lleva a la unidad y la unidad a la fusión con la divinidad. Este es el mensaje que el Festival de Onam y la historia de Bali le transmiten a la humanidad. Discurso en el Auditorio Pûrnachandra el día de Onam el 28-8-1985 |