Discursos dados por Sai Baba
{SB 14} (47 de 60 discursos 1978 a 80)
54. 21/09/80 La vida valiosa
( Impreso en castellano en Mensajes de Sathya Sai, Tomo 11 cap. 6 )
La vida valiosa
21 de Setiembre de 1980
«CUANDO LAS NUBES SE acumulan en el cielo, los relámpagos las iluminan. De igual manera, la sabiduría debe iluminar la educación. Esta palabra de Sai es el sendero de la verdad. Más pequeño que el átomo más pequeño, más grande que la cosa más grande, testigo de todo, el Alma es Brahman y Brahman es el Alma.»
¡Estudiantes!: Desde el amanecer hasta el ocaso transcurre su día que se acaba con el sueño. Así prosigue sin cesar la vida del hombre sobre la tierra. Cuando el sol sale en el este, decimos que el día alborea, y cuando se pone en el oeste, decimos que ha llegado la noche. De acuerdo con el hombre, ¿no son la salida y la puesta del sol creencias infundadas? Los hombres señalan las cuatro direcciones como este, oeste, norte y sur, determinando una posición respecto de la otra, conforme a esos conceptos. Pero, ¿en realidad existen? Cuando reconocemos que la Tierra es esférica, tales divisiones resultan falsas.
Así, la experiencia diaria del hombre difiere de la verdad, pero él confía en esa experiencia. Por ejemplo, cuando estamos sentados en un auto o un tren y se mueven, nosotros nos movemos con ellos; sin embargo, pensamos que estamos inmóviles. De este modo, es una experiencia natural del hombre que mientras la Tierra gira sobre su eje alrededor del Sol, nosotros nos mantenemos quietos. A pesar de que la Tierra se halla en rápido movimiento, pensamos que está inmóvil, y aunque nosotros estamos inmóviles sobre la Tierra, siempre nos hallamos en movimiento. Hasta el más grande científico actúa de acuerdo con esta experiencia aparente, no de acuerdo con la verdad. Aun cuando no hay salida ni puesta del Sol, el hombre cree que las hay, y aunque no existe ningún este, oeste, norte o sur, él acepta que existen. Las normas científicas son observación y experimentación.
Cuando el primer astronauta, Gagarin, afirmó que no había visto a Dios en ningún lugar del espacio exterior, él se basaba en un instrumento mecánico para llegar a esa conclusión. Nunca realizó una investigación de la mente. Para llegar a la verdad, uno debe reexaminar lo que ve, porque lo que observamos con los ojos no es conocimiento verdadero. El conocimiento verdadero consiste en saber que en todo lo que se ve hay siempre una causa oculta. Ésta no puede conocerse estudiando máquinas (yantra) solamente, sino estudiando la mente y dedicándose a la indagación mental (mantra). Al bambú se lo valora por su forma, dureza y belleza. De igual manera, la valía auténtica del hombre radica en su inteligencia. Su inteligencia le ha llegado de muchas vidas y el valor real de su intelecto es practicar la renunciación. Pero nuestro intelecto está cubierto por la ilusión, que es sólo un reflejo irreal de la verdad. Cuando tiramos el agua de una vasija, al mismo tiempo tiramos el reflejo del cielo sobre el agua. El reflejo de la verdad en nuestras mentes es sólo el conglomerado de nuestros deseos.
Hablamos de liberación. ¿Qué es? Es sólo la renunciación a lo irreal. Supongamos que quieren un vaso de jugo de fruta. A menos que tiren el agua que estaba en el vaso, no podrán verter jugo en él. De igual manera, a menos que renuncien al materialismo, la espiritualidad no podrá llegar a ustedes. La liberación no es una práctica espiritual diferente, sólo es renunciar a los deseos innecesarios. Por la ira, la sabiduría se pierde. La discordia es causa de la ira; de la discordia, los celos, y de los celos, la ignorancia.
Las Upanishads dicen que el Universo entero es la forma de Vishnú, por lo cual la sabiduría genuina es ver al Uno. Debido a la dualidad o diferencia, la sabiduría declina.
Hay tres tipos de conocimiento. Conocimiento de la energía material, conocimiento de la energía mental y conocimiento de la energía cósmica. La energía cósmica opera, en forma de conocimiento divino, en toda persona. La materia en cualquier aspecto es sólo energía. Sin átomos no es posible tener materia alguna, y en el átomo la energía toma la forma de electrón, protón, neutrón, etcétera. La energía brota de la estructura de los constituyentes atómicos. Por ejemplo, si toman agua del océano y la ponen en una vasija, toma la forma de ésta, y cuando sopla la brisa se forman ondulaciones que manifiestan una energía proporcional a la cantidad de agua en la vasija. Pero cuando el huracán sopla en el mar, las grandes olas pueden hundir barcos y pulverizar riscos. Los científicos sólo se ocupan de la fuente externa de la energía, no investigan las fuentes internas. Ustedes vana millones de kilómetros dentro del espacio, pero no penetran media pulgada en ustedes, donde está su fortaleza, la energía del Alma.
La gente piensa que vive del alimento. Entonces, ¿por qué mientras los ricos, que tienen los medios para comprar toda clase de alimentos, sucumben a una muerte prematura, los pobres siguen viviendo? «No sólo de pan vive el hombre.» En efecto, el hombre vive por el poder del Alma. Por consiguiente, usen con inteligencia su fuerza corporal y mental, su riqueza y educación para comprender el poder del Alma. Sin discernimiento, ¿de qué sirve la fortaleza física? Dritarashtra tuvo cien hijos y cientos de miles de soldados en quienes podía confiar. Pero, ¿qué le sucedió? Suponer que se puede lograr paz mental de la riqueza o de los parientes y amigos es grave error. Tal paz sólo proviene de Dios. En efecto, no hay fuerza alguna superior al amor; donde está el amor lo hay todo; por ello, deben vivir en Dios y vivir en el amor; entonces todo estará bien. Ustedes deben hacer que también otros vivan en el amor.
Alfred Nobel inventó la dinamita, que causó gran destrucción. Alfred fue muy infeliz por esto. Tenía mucho dinero y fama, pero se sentía tan desdichado por la destrucción que trajo al mundo, que hizo un testamento donando toda su fortuna para el bien de la humanidad.
Este colegio ha sido establecido para impartirles fortaleza ética, moral y espiritual. Sólo piensen cuánto sacrifican sus padres para darles una educación apropiada; así pues, no desperdicien su vida. Purifiquen su cuerpo y su mente. Este lugar es como un taller donde se reparan y rehacen carros averiados. No abriguen malos pensamientos ni hagan ningún daño. La vida es santa, sagrada. Vayan por ella con gozo y felicidad. No vayan con cara sombría y amargada. La felicidad es unión con Dios. Este período de su vida es sagrado. Si a esta edad no son capaces de lograr felicidad y vivir en bienaventuranza, ¿podrán cuando sean mayores? Ahora sólo tienen que conducir dos piernas. Pueden saltar de un lado a otro libremente. Pero cuando se casen y cuiden una familia, ¡se moverán como una oruga con muchas patas! La gente debe identificar a los estudiantes del Colegio Sr¡ Sathya Sai mirando sus caras resplandecientes y gozosas. Llenen sus corazones de amor y hagan todo su trabajo con amor.
Ustedes no cantan los bhajans con voz muy alta. Cuando un hombre se ha caído en un pozo y no puede salir, no murmura para sí; grita muy fuerte para que lo salven. ¿Qué hacen ustedes para alejar a los pájaros que se posan en los árboles? Dan fuertes palmadas. De igual manera, canten con voz alta los nombres de Govinda, Gopala, Narayana, y palmeen con vigor para que los pájaros de la pasión maligna, lujuria, odio y codicia que infestan sus mentes se alejen volando. Hagan que su vida sea valiosa.
Discurso Divino
Prashanti Nilayam
21 IX 80