El hombre no llega a ser plenamente humano por el mero hecho de convertirse en una persona moralmente próspera. También tiene que lograr progresar espiritualmente. El cuerpo, la mente y el espíritu: los tres juntos constituyen al hombre. El animal se ocupa principalmente del cuerpo. El hombre se ha elevado desde que ha sido equipado con una mente. El cultivo del espíritu lo elevará a la Divinidad. Los tres están entrelazados y son interdependientes; cada uno promueve al otro. Sin la mente, el cuerpo no puede decidir acerca de ningún paso. La mente y el cuerpo tienen que servir al espíritu y volverse conscientes del Atma Divino. La salud es muy importante para una vida plenamente disciplinada. La salud significa integridad, plenitud. Los sentidos y la mente tienen que ser controlados y regulados para que el hombre pueda ganar la batalla de la vida. El autocontrol es control de los sentidos, control de la mente. Esto es llamado de otra manera: cultura (samskruti). La cultura debe ser evidente en todos los aspectos de la vida: al estudiar, comer, dormir, jugar, etc. La cultura se expresa como disciplina. – Sai Baba. (Discurso, 23 de marzo de 1984).