La verdad, la caridad, el sacrificio, la pureza, la sencillez, el servicio al Gurú y el estudio son las nueve gemas que debe guardar todo buscador del conocimiento. Dharma, Santhi, Prema y Ahimsa se deben hallar en el estado en el que prevalecen la verdad y la bondad. La verdad fundamental es una, pero los sabios la han llamado con diversos nombres. El hombre ideal es quien se adhiere a la verdad y no renuncia a ella bajo ninguna circunstancia. Él vive una verdadera vida. La verdad no existe solo para la salvación de la persona, sino que trasciende las limitaciones del tiempo, el espacio y las personalidades. Es el aliento vital de todas las naciones, para todos los pueblos, en todas las épocas. El padre de la humanidad, Manu el grande, luego de gran indagación, análisis y experiencia, entregó la siguiente bendición a la humanidad: «Sathyam bruyaath, priyam bruyaath, Na bruyaath Sathyam Apriyam». Esto significa: «Digan la verdad, digan lo agradable. Nunca digan una verdad de modo desagradable). No deben pronunciar una mentira porque sea agradable, ni deben expresar una verdad que sea desagradable. Sathya Sai. Discurso, 22 de noviembre de 1985.
