Visvamitra, confiando en su inteligencia, su fuerza física y el poder de sus armas, buscó librar una guerra contra Vasishta, quien confiaba en el poder de lo Divino. Finalmente, comprendió la verdad de que sus poderes no servían de nada contra el poder de lo espiritual y, renunciando a su reino, emprendió una severa penitencia. La destreza física no es poder en absoluto; es realmente un signo de debilidad. Todos los poderes físicos carecen en verdad de poder. Toda la riqueza mundana es transitoria. El hombre de hoy busca estos placeres efímeros, olvidando su divinidad inherente. Los estudiantes deben cultivar la confianza en sí mismos y manifestar su divinidad en sus palabras, sus canciones, sus deportes y todas sus acciones. Sin embargo, de vez en cuando, la debilidad en ellos puede aflorar. Por ejemplo, muestran su debilidad interior cuando sucumben a las dificultades, se ven superados por el dolor y son incapaces de enfrentar las pérdidas. Los estudiantes deben afrontar tales situaciones con fortaleza. Sean valientes. Cuando enfrentan las dificultades con coraje, están destinados a tener éxito. Por lo tanto, confíen en sí mismos y logren el éxito en todas las áreas de la vida. – Sathya Sai. Discurso 14 de enero de 1997.