En este mundo no es posible hacer uso de nada sin transformarlo de uno u otro modo. No se puede comer arroz sin convertir el paddy en granos de arroz y cocerlos. De la misma manera, no se puede tener tela sin transformar el algodón en hilo y tejerlo como una tela. Asimismo, los seres humanos necesitan transformación en tres aspectos. El primero es la transformación corporal; el segundo se refiere a la mente, y el tercero al Atma. El Atma (el Alma Divina) es invariable. Solo el cuerpo y la mente requieren transformación. ¿Cómo tiene lugar la transformación? Por ejemplo, si preguntamos si la plata o la piedra pueden convertirse en Dios, la respuesta es «sí». Cuando un escultor convierte un trozo de roca en un hermoso ídolo para que sea adorado en un santuario, lo que era inerte y sin valor se hace sagrado. De la misma manera, todo lo insignificante y mundano puede ser transformado, con el tiempo, en algo sagrado y divino. Esta transformación es muy necesaria. Sathya Sai (Discurso, 14 de julio de 1984)