Usted desea tener dicha. Pero, ¿de dónde obtienes la dicha? ¿De una tienda en el mercado? ¿O disfrutando de una comida suntuosa con una variedad de platos en un hotel? ¡No, en absoluto! La dicha tiene que venir de adentro. Eres, de hecho, la encarnación de la dicha. Fuiste dichoso en el momento de tu nacimiento. Pero, una vez que comenzaste a desarrollar apego con el mundo, comenzaste a llorar. Por lo tanto, tienes que reducir tus apegos mundanos. Actualmente tienes mucho apego al mundo. Por lo tanto, estás debilitando tu cuerpo. En última instancia, terminará en la tristeza. La preocupación es una cualidad muy mala. Date prisa, preocúpate y curry: estos tres juntos debilitan mucho el corazón. Por lo tanto, manténgalos a distancia. Siempre que estés en dificultades, solo asegúrate de que estas son nubes pasajeras que se alejarán, por lo tanto, no debes preocuparte. Lo que venga, se tiene que ir, son momentáneos. Sathya Sai (Discurso 28 de julio de 2007)
