Miércoles 10 de Febrero de 2021Las oraciones pidiendo algún beneficio o ganancia no deben ser dirigidas a Dios. ¡Porque eso significa que Dios espera hasta que se le pide! Entréguense a Él; Él se ocupará de ustedes como lo considere mejor, y eso será lo mejor para ustedes. Dios no otorga la gracia en proporción a las alabanzas que recibe. Cuando rezan pidiendo algo a Dios corren el riesgo de condenarlo, si por alguna razón la oración no es respondida de la manera en que ustedes querían que lo fuera, o tan rápido como querían que lo fuera. Esta contingencia surge porque sienten que Dios es un extraño, que reside en algún cielo o lugar sagrado, muy lejos de ustedes. Dios está en ustedes, Dios está en cada palabra de ustedes, en cada acción y en cada pensamiento. Hablen, hagan y piensen de una manera adecuada para Él. Hagan la tarea que Él les ha asignado, lo mejor que su capacidad lo permita, y a satisfacción de su conciencia. Esta es la puja (adoración) más gratificante. (Discurso, abril de 1973)
